viernes, 29 de julio de 2011

No paro

Y es que yo normalmente estoy atareadísima, siempre tengo algo que hacer. Y por qué negarlo, me gusta, si no me aburro. Conozco gente que se toma la vida con más calma, las cosas las hace con tiempo y sólo una cada día, tranquilamente. Imagino que eso va en el carácter porque yo no sé hacerlo de otra forma.

Así que hoy escribo mientras como, ni ayer ni anteayer tuve tiempo y no sé si podré hacerlo los próximos días, aunque espero que sí.

El martes fui a la revisión de los dos años de mi Bichito. Todo bien, pesa 10,800 kilos y mide 85,5 cm. En altura casi percentil 50 y en peso percentil 10. Mi Bichito come perfectamente, por lo que no me preocupa y a la pediatra tampoco. Hay niños que por constitución son delgados y mi Bichito es como su papi. Todo correcto, por lo que imagino que ya hasta los 4 años, no?? No tengo ni idea de cuando es la próxima revisión. Lo único es que la van a repetir la ecografía abdominal para ver dónde se encuentra el quiste folicular que le detectaron hace un año. Ya os contaré cuando vayamos.

También he tenido que ir a hacer copias de las fotos para la guarde, porque como nosotros solemos irnos de vacaciones en septiembre, en vez de incorporarse con todos los niños, lo harán dos semanas después. Así mi Pequeñín lo hará con casi 6 meses y lactancia materna exclusiva y mi Bichito lo hará con su profe, por lo que creo que no será tan traumático. De todas formas, ambos harán una semana de adaptación. Pero qué ocurre, pues que tengo que entregar relleno, con fotos y con copias, los dossieres de ambos en la guarde antes de que cierren, hoy es el último día y el martes fue el día que me los entregaron. Pero ya lo tengo todo y los llevaré cuando vaya a buscar a mi Bichito.

Encima se me han acabado las pastillas para prevenir las mastitis, así que he tenido que ir a la facultad de veterinaria a por más, aunque esta vez no han podido darme nada más que para un par de semanas. Espero que no se me complique después.

Además están instalándonos el aire acondicionado en toda la casa desde el martes y mañana abrirán techos para pasar los tubos, por lo que me voy con mis hijos a casa de mi madre a pasar unos días para que ninguno de los dos trague polvo. Estaremos hasta el martes, por lo menos, y todavía no he hecho ninguna maleta, pero he ido a comprar una barrera portátil. Necesito una para mi Pequeñín y otra para mi Bichito y ya, de paso, tengo una para cuando nos vayamos de vacaciones.

Os diría que voy a descansar, pero para qué engallarnos, lo dudo. De lo que estoy segura es de que mi Bichito se lo va a pasar bomba y espero tener una visita muy especial, pero eso ya os lo contaré si sucede.

Imagino que muchas son las personas que hoy cogen vacaciones y que están ultimando algunos detalles o están ya en la carretera. Pasarlo bien, disfrutar, descansar y aprovechar el tiempo al 200%, nosotros esta tarde nos vamos al Micrópolix que nos invita Arnidol.

Muchísimos besos y felices vacaciones a los que las tengan y a los que no, feliz fin de semana.

miércoles, 27 de julio de 2011

De aniversarios y fechas importantes

En el pasado mes pasaron dos fechas importantes. Estábamos de vacaciones en la playa, no sé si os acordáis, y llegaba una fecha muy importante en mi vida, la muerte de mi padre. Sabía que era por esa fecha.

El cumpleaños de mi padre es un día 13 y su santo también en día 13, pues no sé qué me ocurrió que creí que también había fallecido el día 13. Me desperté el 12 de junio en la cama y me di cuenta que había pasado el día 10, fecha en la que mi padre y años antes, mi abuela, habían fallecido. Aquella mañana lloré y me entristeció haber confundido los días. Hace seis años que nos dejó y no le he olvidado, para nada. Cada mañana me despierto junto a mi hijo, que lleva su nombre. A veces, cuando miro a mi Pequeñín, le veo a él, mirándome y sonriendo a través de sus ojos. Cómo pude confundir las fechas, todavía no me explico. Sin embargo, lo hice y me sentí mal por ello.

Le sigo echando mucho de menos y siento una tremenda pena cuando miro a mis hijos y sé que él no los va a conocer y que ellos no van a poder jugar con su abuelo. La familia es muy importante y aunque siempre nos tendrán a nosotros, sé que mis hijos pueden contar con sus abuelas y que ellas les quieren con locura. Pero siento mucha tristeza cuando me acuerdo de mi padre, cuando alguien me pregunta cómo se llama mi Pequeñín. Yo a mi padre nunca le llamé por su nombre, siempre le llamé Papá. Recuerdo sus palabras cuando le decía: "Papa" y él me respondía: "El Papa está en Roma". Así que rectificaba: "Papá..." y ya le pedía algo. Me alegro mucho de que mi hijo se llame como mi padre y a veces se me pone un nudo en el estómago cuando digo su nombre. Me cuesta mucho asimilar que ya no está y muchas cosas me recuerdan a él día a día. Y es que es difícil de asumir que ya no está, que no comparte conmigo cada día, que no puedo llamarle o no puedo verle, porque fue MI PADRE y le sigo queriendo muchísimo.

Me encanta mirar a mi marido cuando juega con mi Bichito y siento añoranza de cuando jugaba con mi padre, cuando me montaba los juguetes o me llevaba a entrenar. Recuerdo cuando me enseñó a montar en mi bici roja y cuando me quitó las ruedas supletorias, cada vez que me caía él venía a levantarme. Recuerdo mirándome en la puerta del bar mientras yo patinaba y cómo se enorgullecía de mi. Recuerdo lo nervioso que se ponía cuando hacía un examen y lo orgulloso que estaba cuando los aprobaba. Recuerdo lo feliz que era cuando decía que su hija estudiaba matemáticas y murió justo antes de graduarme. Nunca me vio graduarme y eso me duele en el alma. A veces, cuando miro a mi marido y mi hija, me veo a mi padre y a mi, una lágrima rueda por mi mejilla y siento nostalgia de mi padre.

Mi hijo lleva el nombre de mi padre y ojalá se sienta tan orgulloso como lo estoy yo de haberle puesto este nombre. Ahora que le miro, mientras se mece en la hamaquita, con esos mofletes y esa naricilla, con esos bracitos rechonchos y esos rodeles en las piernas, sé que algo en él es de mi padre, como el 50% de mi y me encanta.

A veces, los aniversarios, son por algo triste. 


Y otra fecha que se me pasó fue mi primer cumpleblog. El 17 de junio de 2010 hice mi primer post y desde entonces han pasado muchas personas por aquí, a leerme, a dejar sus comentarios, a compartir sus experiencias conmigo. Gracias a todas ellas por alegrarme día a día, por disfrutar juntos de este proyecto y participar en él. Muchas sois las personas que os pasáis por aquí y dejáis un pedacito de vosotros. Espero seguir mucho más a vuestro lado y disfrutar como lo hago ahora cada día que escribo, aunque ahora con mucho menos tiempo. Me encanta leer vuestros comentarios y saber que estamos creando tribu. Gracias de todo corazón.

martes, 26 de julio de 2011

Fin de semana de celebraciones

Desde el cumpleaños de mi Bichito el pasado miércoles no hemos parado ni un segundo!!!

Además de estar preparando alguna cosa para la celebración de su cumpleaños el domingo, hemos seguido con nuestra vida social.

El viernes vinieron unos amigos a traerles unos regalos a mi hijos y volver a ver a mi Pequeñín con casi 4 meses. Salimos a cenar a una terraza y pude comprobar que mi Pequeñín no se duerme cuando hay gente y jaleo y que necesita coger el sueño en casa tranquilamente. Y mi hija me dejó alucinada. Mi Bichito come muy bien y de todo, pero es que el viernes comió: morcilla de cebolla, morcilla de arroz, pimiento de piquillo, lacón, rabas y cebolla frita con las rabas. Y sólo tiene dos años!!! Nuestros amigos estaban alucinados y es que mi Bichito come de todo desde hace mucho, pero ese día nos sorprendió a nosotros también.

El sábado era la experiencia Babykini y al final pude conocer en persona a LadyA. Por desgracia ni Estanjana ni Eloísa pudieron asistir y las echamos muchísimo de menos. Disfrutamos un montón, hubo matronatación y masaje. Nosotros subimos primero a masaje y mientras mi marido le daba un estupendo masajito a mi Pequeñín, yo jugaba con mi Bichito, no estaba receptiva para recibir un masaje e intenté que no revolucionara demasiado la clase. Mi marido aprendió algunos movimientos y yo miré por el rabillo del ojo, por suerte todos me los sabía, dado que yo con mi Bichito asistí a dos cursos de masaje infantil.

Cuando terminamos bajamos a matronatación, pero mi Pequeñín tenía hambre, por lo que sólo se metió mi marido y mi Bichito. Cómo disfruté viéndoles, lo que pudo llegar a reírse mi Bichito. No paraba de tirarse, de sonreír, de jugar, de disfrutar, de reírse y mi marido tuvo la suerte de compartirlo con ella. Me dio un poco de envidia, para qué negarlo, pero yo comparto muchos momentos con ella y creo que es genial y vital que puedan disfrutar juntos para afianzar la relación que día a día van construyendo.

Después nos pusieron unos aperitivos y disfrutamos juntos del momento. Aproveché para hablar con LadyA y compartir un ratito juntas. La verdad es que lo mejor de la experiencia fue conocerlas al fin y poderle dar unos cuantos abrazos. Uno de ellos con Alex!!! Y es que fue un momento muy especial, porque llevamos más de un año hablándonos, leyéndonos, comentándonos y, por fin, pudimos conocernos. Aunque creo que no tardaré en verla e ir a visitarla un par de días, dado que parte de nuestras vacaciones discurrirán por tierras catalanas.

Y el domingo fue el gran día. Por desgracia echamos también en falta algunas ausencias y nos acordamos mucho de ellos. Había preparado un montón de cosas para su cumpleaños: nocilla, carrot cake, galletas de mantequilla, croquetas de pollo y hojaldritos de jamón de pato y queso de cabra. Mi madre preparó ensaladilla, patatas ali-oli y un par de tortillas y entre las dos preparamos los sanwiches y demás aperitivos. Mi marido fue a por la tarta y la empanada y junto al novio de mi madre decoraron el local con globos y guirnaldas, prepararon la bebida y dejaron todo listo para cuando bajara la cumpleañera. Había muchísima comida y los peques se lo pasaron en grande. Disfrutaron un montón comiendo, jugando, se persiguieron, corrieron, bailaron, rieron... Una tarde muy especial en la que mi Bichito disfrutó como nunca.

Cuando la cantaron el cumpleaños feliz la dio tanta vergüenza que vino a refugiarse en las piernas de mamá. Si hubiera llevado falda, se habría metido debajo. Sopló su 2 y comió un trocito de la tarta. La regalaron muchísimas cosas y disfrutó con los nenes más grandes. Su pobre hermano no durmió en toda la tarde y hasta las 22:30 no cerró los ojos. Eran las 23:30 cuando nos subíamos a casa, con un montón de comida que había sobrado y muy cansados, pero muy satisfechos de la pequeña fiesta que habíamos montado. Mi Bichito llevaba una sonrisa de oreja a oreja y con sólo ver lo feliz que estaba, todo había valido la pena.

Ha sido un fin de semana largo con la fiesta de ayer, en la que aprovechamos para recoger y limpiar tanto el local como la cocina y para jugar con los nuevos juguetes. Pero hemos disfrutado mucho, hemos compartido momentos increíbles con amigos y hemos echado de menos a otros que no pudieron acompañarnos. Pero lo hemos pasado muy bien y aunque agotador, ha sido un fin de semana inolvidable.

Mi bebé ya tiene dos añitos y a partir de ahora irá perdiendo poco a poco esas cositas de bebé para ir convirtiéndose en la niña tan dulce y feliz que asoma de vez en cuando.

Feliz última semana de Julio a todos!!!

jueves, 21 de julio de 2011

Dos nuevos inquilinos: Pili y Mili!!!

Recogí ayer de la guarde a mi Bichito, cantando el cumpleaños feliz. Parece que debieron de cantárselo varias veces, porque se lo sabe entero!!! Debí de repetirlo como 15 veces desde su guardería hasta el centro comercial. Fuimos a merendar patatas fritas, la encantan, un día es un día, y allí esperamos a su padre.

A mi marido le encantan los animales, toda clase de animales. De pequeño ha tenido bichos de todo tipo y hasta tuvo una cangreja durante dos años. Yo, sin embargo, tuve los típicos perros. Él es más exótico que yo. Al poco de salir juntos me dijo que quería una falsa coral, ¿como? ¿Una serpiente en mi casa? Ni de coña. Fue entonces cuando me comentó que le gustaban mucho los hurones. Yo no tenía ni idea qué era un hurón y cuando me lo enseñó, me enamoré de él. Tal fue nuestro enamoramiento, que se vino ese mismo día a vivir con nosotros. Mordisquitos, mi precioso y cariñoso Mordisquitos.

Tenía un problema hepático, que fue imposible de compaginar con un bebé, por lo que cuando nació mi Bichito se lo regalamos a unos chicos que tenían dos hurones más y la casa preparada para ellos. Fue muy duro deshacernos de él, pero semanalmente hablábamos y me contaban como se encontraba. Por desgracia cogieron una enfermedad y se murieron dos de los tres hurones, entre ellos, mi Mordiquitos.

Desde entonces no había vuelto a entrar ningún otro animal en casa, pero este verano cuando estuvimos en la playa mi Bichito y su papá estuvieron cogiendo caracoles. Cada día los limpiaban, les daban de comer y cantábamos su canción: "Caracol-col-col, saca los cuernos al sol, que tu padre y tu madre ya los sacó". Cuando vinimos a Madrid mi madre le trajo gusanos de seda y ayudó a sus cuidados diariamente. Los sacábamos de la caja, la limpiábamos, les ponía su comida y ella uno a uno los iba echando de nuevo a la caja. La verdad es que los ha tratado con mucho cariño. Hace poco salieron las mariposas y han puesto los huevos en una caja que guardaremos hasta el año que viene.

Por todo esto es por lo que pensamos que un buen regalo sería un animalito del que ella pudiera hacerse cargo, para que su padre le enseñara a cuidarlos, a limpiarlos y a tratarlos con cariño. Su padre ya le ha enseñado a cuidar las plantas, tienen unas cuantas que riegan cada dos o tres días y se ocupan de ellas, están preciosas.

Así que ayer cuando terminamos de merendar, nos dirigimos a la tienda de animales y le enseñamos las tortugas. "¿Cuántas quieres Bichito?". "Dos" (ayer era el día del dos). El dependiente se puso unas cuantas en la mano y las dos que quisieron irse y fueron más rápidas, son las que nos trajimos a casa y las pusimos en el tortuguero.

Ahora tenemos dos nuevos inquilinos en casa que hemos bautizado como Pili y Mili. Bienvenidas a nuestra pequeña pero acogedora casita!!

miércoles, 20 de julio de 2011

¡¡¡FELICIDADES BICHITO!!!


Mi bebé cumple hoy dos añitos y me hace tremendamente feliz. Hay tantas cosas que quiero decir, tantos sentimientos que quiero plasmar...

Hace exactamente dos años estaba en el paritorio del hospital deseando que mi Bichito saliera de una vez, pero no sabía hasta qué punto aquello me iba a cambiar como persona, como mujer, pero sobre todo me iba a convertir en madre.

Yo que creía que nada ni nadie podía cambiar mis opiniones, unas ideas preconcebidas que te inculcan los demás, si le coges en brazos, se acostumbra, si duerme contigo o en tu habitación no lo sacarás hasta los 18, va a estar comiendo teta hasta la universidad, etc, etc. No podía ni imaginar que una personita tan pequeñita podía hacerme sentir tan especial.

Aquel día mi vida, nuestras vidas, cambiaron por completo. Nos hicimos papás y mi Bichito alimentó el amor que había en nuestras vidas hasta niveles jamás imaginados.

Nos dejamos llevar por tu amor, ayudándote y apoyándote cada día, acompañándote en esto que llaman crecer. Siempre a tu lado, guiándote en cada paso sin obligarte ni imponerte, sino enseñándote y compartiendo contigo. Aunque algunas veces nos ponemos muy borricos, pero nosotros también estamos aprendiendo y estamos suavizando nuestros caracteres.

Tú nos has enseñado a querer mucho más, a respetar, a comprender, a soñar, a reír, a llorar, a tener muchísima más paciencia, a jugar, a ganar, a perder, a sufrir, a amar y a un sinfín de cosas más.

Gracias a ti soy mejor persona y soy más feliz de lo que nunca hubiera imaginado.

Además hoy hacemos dos añitos de lactancia. Ya os expliqué la lactancia materna de mi Bichito hace ya mucho tiempo y hace unos días, la lactancia materna en mi embarazo, sólo me queda contaros como nos va ahora y espero no tardar demasiado en hacerlo. Pero ahí seguimos y seguiremos hasta que tú y yo decidamos, ya se ponga quien sea como quiera.

Y esta tarde nos iremos a merendar al centro comercial y a comprarte un regalito por tu cumple, dos tortuguitas para que cuides cada día. Estoy segura que te encantarán y que vas a disfrutar mucho con ellas mientras papá te enseña a darles de comer y a limpiarlas.

Hoy pequeña, mi pequeña, mi bebé, porque princesa tú siempre serás mi bebé, hoy es tu cumpleaños y escucharte decir "dos" ha sido como música para mis oídos.

Eres una niña preciosa, dulce, cariñosa, un poco bichito, para qué vamos a negarlo, y tímida. Tienes unas cualidades increíbles y cada día me sorprendes con algo nuevo. Estoy orgullosa de ser tu madre, aunque siempre lo estaré y estoy maravillada de ti, porque cada día nos regalas una sonrisa que ilumina los nuestros.

El día que tú naciste nosotros nacimos contigo para afrontar los nuevos días siempre a tu lado.

Te queremos princesa!!! Feliz cumpleaños!!!

martes, 19 de julio de 2011

Y nos vamos con Arnidol a...

Menuda semana que tenemos!!! Mañana es el cumpleaños de mi Bichito y para celebrarlo hemos decidido hacer un montón de cosas esta semana, jajajaja.

Ya os he contado en esta entrada y en esta otra lo efectivo que es Arnidol para los golpes. Yo lo utilizo cada vez que mi Bichito se da uno, gracias a su poder calmante, porque está compuesto por Arnica y Harpagofito, que son dos ingredientes naturales con propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

Arnidol nos ha invitado a pasar una tarde en Micrópolix con algunos blogueros y su familia. No sé si lo conocéis, yo no lo conocía, pero me ha gustado mucho y estoy deseando ir. Os dejo el resumen para que podáis conocerlo vosotros mismos:

Micropolix es más que un lugar, es un concepto innovador que integra ocio y educación, reuniendo dentro del mismo proyecto a niños, familias, docentes y empresas socialmente responsables.

La semilla de este proyecto es Micropolix Madrid. Toda una ciudad a escala construida en un recinto cubierto de 11.200 m2 en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes (Madrid).

Estructurada en barrios, calles y plazas, Micropolix cuenta con edificios de diversos estilos que albergan los espacios típicos que conforman una ciudad: organismos y servicios para ciudadanos (ayuntamiento, bomberos, policía, hospital...), medios de comunicación (plató de televisión, periódico, radio...), espacios de ocio y cultura (teatro, biblioteca, ciber...), y establecimientos significativos (supermercado, banco...). y lo mejor, todo funciona con su propia moneda. Más de 30 espacios tematizados en los que niños y niñas pueden participar en actividades y juegos divertidos relacionados con las profesiones.

Jugando, descubriendo, participando, investigando, experimentando... niños y niñas van a vivir situaciones cotidianas, se van a acercar a las normas de convivencia y a los valores sociales, van a elegir y tomar sus propias decisiones. ¡Van a ser los protagonistas de su propia aventura en la ciudad! Micropolix es una propuesta de ocio educativo diferente y de calidad, basada en el aprendizaje experiencial de valores.


Las actividades de Micropolix combinan juegos clásicos con las propuestas más innovadoras adaptadas a las capacidades, gustos e intereses de los niños, permitiéndoles aprender jugando. La ciudad tiene como objetivo fortalecer y reforzar habilidades sociales y culturales, poniendo especial énfasis en potenciar la autonomía e iniciativa personal de niños y niñas.

En noviembre de 2009, la Consejería de Familia y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid concedió a Micropolix el Premio Infancia 2009, en la categoría de Proyecto innovador, por la labor educativa dirigida a niños y niñas, que aprenden valores de convivencia esenciales para su desarrollo como personas mediante el entretenimiento y la diversión.



Tiene una pinta estupenda, me aparece que es una apuesta a un ocio alternativo que suscitará el interés de los peques de la casa. La única pega es que está orientado para niños más mayores, de 5 a 14 años y mi Bichito cumple mañana dos años. Así que hemos decidido que venga mi sobrino para que disfruten los dos y así la enseñe la ciudad y compartan ese rato juntos. Él cuida mucho de ella y a ella la encanta ir con él de su mano.

Estoy segura que pasaremos una tarde inolvidable y muy divertida tanto para ellos como para nosotros. Podrán pasear por sus calles y plazas, atravesar los diferentes barrios y participar en las actividades pensadas especialmente para ellos. Encima volveré a ver a Mamá sin complejos y a su pequeño.

Me encanta esta propuesta de ocio alternativo, diferente a todas las que conocía hasta ahora. Tengo ganas de ir, de ver cómo se desenvuelven nuestros pequeños y tomar buena nota para llevarles de nuevo cuando puedan interactuar un poquito más en esta fabulosa ciudad. Estoy segura que vamos a disfrutar un montón, pero no os preocupéis, que estaréis bien informados de todo!!!

Gracias a Arnidol vamos a conocer Micrópolix. YUPYYYYYYYYYY!!!

domingo, 17 de julio de 2011

Pesadillas

Ya no solo duermo poco sino que ahora me acompañan cada noche mis antiguas pesadillas. Así que me levanto más cansada que de costumbre y mucho más sensible. Me cuesta un poco más empezar el día.

Yo creía que no aparecerían, pensaba que quizá se hubieran esfumado, pero siguen acompañándome cada noche. Por suerte las olvido al despertar, son sólo un simple recuerdo de la mala noche, pero mi ojeras y mis ojos cansados me delatan.

Menos mal que mi Pequeñín no se ha llevado ningún golpe y por suerte sigo sin mover mis extremidades, sin embargo, mis músculos se tensan y me duelen al despertar, como si hubiera estado toda la noche haciendo ejercicio.

Ayer me eché la siesta, estaba muy cansada y nos habíamos acostado tarde. Me levanté con la espalda dolorida, inflamados los músculos del cuello y me dolía un pie, el músculo estaba en tensión y todavía no se había relajado. Me costó mucho hacer el juego del pie y tuve que esperar bastante para recuperarlo por completo. Una ducha caliente me ayudó a relajar todos los músculos de mi cuerpo.

Mientras me duchaba empecé a temblar, siempre que empiezo con pesadillas tengo miedo. ¿Cuánto durarán esta vez? ¿Podré controlarlas? ¿Me superarán? ¿Se irán pronto? Sin embargo, por el que me dio más miedo fue por mi Pequeñín. ¿Y si le doy un golpe? ¿Y si le hago daño? Reconozco que me había despertado mucho antes de levantarme de la cama, pero no podía dormirme a su lado porque tenía miedo de agredirle sin querer. Así que me quedé inmóvil, a su lado, observado su respiración y recé para no hacerle daño jamás. Me ha ocurrido lo mismo esta noche y aunque no le he dado, cuando he despertado de la pesadilla he sentido tanto miedo, que no he podido volver a dormirme por si no controlaba mi cuerpo.

Siento un vacío en el estómago y sé que no es sólo miedo, sino terror. Tengo ganas de llorar y necesito una dosis alta de mimos. Me siento frágil y torpe y sólo espero que pronto desaparezcan para que pueda descansar tranquila las pocas horas que lo consigo. Pero lo que más deseo es no hacerle daño a mi Pequeñín. Él duerme conmigo y cuando le echo en la minicuna no está a gusto y se revuelve, es echarle a mi lado y se duerme plácidamente, yo velo por él mientras descansa y él se encuentra más a gusto a mi lado. Con mi Bichito no coleché por este motivo principalmente y porque no lo necesitaba, sin embargo, mi Pequeñín sí lo necesita y no me gustaría tener que perturbar su sueño por un problema mío.

Así que hoy me siento un poco triste, llorona, depre y me asusta pensar en el momento de irme a la cama, pero es que estoy tan cansada...

viernes, 15 de julio de 2011

Y los ganadores son...

Como ya sabéis, nos hemos coordinado Yo madre y de Mis Chicos y yo, para que todas o casi todas recibáis un kit de playa. Así que no os preocupéis si no estáis en mi lista y revisar las suyas, en los próximos días, para ver si sois las afortunadas.

Los 5 kits de playa van a ir a parar a las manos de...

LadyA ¡BIEN!
MamiGormiti ¡BIEN!
njubillar@hotmail.com ¡BIEN!
Gema ¡BIEN!
Inma y Lizy ¡BIEN!

Muchas felicidades a todas y me pondré en contacto con vosotras vía mail para el envío.

Y ahora un redoble de tambor... ¡turururururururururururururururururu!

El próximo sábado 23 de julio compartirá conmigo baños, risas y charletas...

ELOÍSA!!!

Prepara el bañador nena, que lo vamos a pasar pipa!!!


Gracias a todas por participar y os vuelvo a repetir, que si no estáis en esta lista echéis un vistazo a las de  Yo madre y de Mis Chicos y yo que casi seguro que estaréis en alguna de ellas!!!

Un besazo a tod@s y disfrutar del fin de semana

Concurso y un sorteo

A las 14:00 termina el plazo para apuntarse al concurso. No es que haya tenido mucha participación, pero así tenéis más posibilidades.

Como alguno de vosotros ya sabéis, se ha celebrado el concurso en el blog de Yo madre y de Mis Chicos y yo. Así que, intentaré que nadie se lleve el premio doblemente y miraré su lista de ganadores para que todos tengamos oportunidad de ganar el kit:

1.- Cartafol
2.- LadyA
3.- MamiGormiti
4.- Estanjana
5.- njubillar@hotmail.com
6.- porfinyomisma
7.- Eloísa
8.- Gema
9.- Siempre mamá

Si algun@ quiere apuntarse y no lo ha hecho todavía, sólo tiene que dejar una anécdota acuática en este enlace.

Además mi amiguita Gema, de En mi nube de azúcar..., está haciendo un sorteo súper chulo. Se trata de dos cajitas de galletas en forma de cupcake y son preciosas. No sé ni como os lo digo, pero así de paso echáis un vistazo a su maravilloso blog, que vais a flipar la cantidad de postres riquísimos que hace. A mi me ha enseñado a hacer galletas, hojaldritos de pato con queso de cabra y alguna cosa más que haré en la próxima semana. Pero bueno, descubrirlo vosotros mismos, el sorteo está en el siguiente enlace.

Y otra buena amiguita, Eloísa, de Una maternidad diferente, mundialmente conocida, está sorteando dos Puddle Jumper, podéis apuntaros aquí. Como más de una vez os he dicho, os recomiendo este blog con los ojos cerrados. En él podréis descubrir cosas sobre la lactancia, el porteo, la alimentación complementaria a demanda y también conocer a una estupenda mamá y una gran amiga.

Pues hala, ahí os dejo trabajito para que os apuntéis a todos los sorteos.

Muchos besitos a todos, buen fin de semana y esta tarde publico los ganadores!!! Nos vemos!!!

jueves, 14 de julio de 2011

Lactancia materna en mi embarazo

Este post quería haberlo escrito hace mucho tiempo, pero quería haberlo hecho bien, que no se me olvidara ni un solo detalle. Despacio y con buena letra, como tienen que hacerse estas cosas tan importantes. Pero el tiempo, mejor dicho, el poco tiempo no me lo ha permitido y no voy a dejar que pase mucho más antes de contaros mi experiencia.

La lactancia en el embarazo me resultó muy difícil, muchísimo. Me quedé embarazada cuando mi Bichito tenía un año y enseguida el pecho resultó un problema. En aquel entonces mi Bichito hacía dos tomas entre semana, una después de merendar y otra después de cenar, y en los fines de semana añadía una toma más por la mañana.

Al principio, en el primer trimestre, la sensibilidad en los pezones era tal, que me dolía mucho cada vez que mamaba. Además la salieron los dientes y hubo alguna vez que me hizo heridas. No os podéis imaginar el dolor que pasaba en cada toma. Muchas fueron las veces en las que me planteé destetarla, pero me parecía muy injusto. La producción había bajado, el sabor hacía cambiado y aún así ella seguía mamando y compartiendo conmigo esos momentos únicos. Así que aguanté y seguí dándola el pecho.

Creo que la primera que se dio cuenta de que estaba embarazada fue mi Bichito, porque notó el cambio de sabor de la leche y estuvo unos días mamando un poco raro y menos tiempo. Se acostumbró a ello y pudimos continuar la lactancia. Así que si ella se había esforzado, ¿por qué no lo iba a hacer yo?

No sé en qué momento dejó de dolerme para empezar a darme repelús. No lo recuerdo, pero pasó y me costó mucho contarlo y compartirlo. Me sentía fatal, ¿cómo podía darme cosa darle el pecho a mi hija? Había veces que tenía que apartarla porque no lo aguantaba, tenía ganas de gritar, de apretujarla y no lo podía evitar. Eran sentimientos contradictorios, porque mi cuerpo me rechazaba dar el pecho a mi propia hija, pero mi cabeza no quería. Había días en los que salía de la habitación con muy mala leche, cabreada y muy malhumorada. Como enfadada con ella, pero la pobre no tenía ninguna culpa. Mi marido era entonces mi apoyo, me intentaba tranquilizar e iba con ella para ayudarla a dormir, si no lo había hecho yo ya. De verdad que lo pasaba fatal al llegar la noche y tener que darla el pecho, no podía evitar ese repelús y me lo reprochaba a mi misma. La toma de la tarde no era así, no sentía ese desasosiego. Fueron momentos duros, durísimos.

Un día decidí contarlo en el blog y tuve la suerte de que alguien que lo leyó me habló sobre la agitación del amamantamiento y sentí algo de alivio. No porque a alguien más le había pasado lo mismo, sino que yo no era tan rara, tan mala madre como me sentía. Gracias a esto, leí que muchas especies animales cuando están embarazadas rechazan dar el pecho a sus crías y que eso también nos sucede a algunas de nosotras. Yo no llegué a tener sentimientos tan negativos, pero sí que me incomodaba ese repelús hacia mi propia hija.

Durante el embarazo la producción de leche fue cayendo en picado, cada vez menos. Tuvimos algunos momentos duros en los útlimos meses, sobre todo por el cambio del sabor de la leche y porque me hacía mucho daño por hipersensibilidad en los pezones.

Por riesgo de parto prematuro, también estuve poniéndome utrogestan (progesterona), que se libera por la leche, por lo que cambió su sabor. Aún así, el tesón de mi Bichito fue tal, que aunque estuvo unos días tomando chupitos nada más y que yo creía que iba a desetarse, se acostumbró poco a poco y siguió tomando el pecho y con el mismo entusiasmo que antes.

Hubo momentos en los que el dolor parecía insoportable, en los que darle el pecho no resultaba placentero, ni para ella ni para mi. Sin embargo, ella jamás tiró la toalla, ¿cómo podía tirarla yo? Ella estaba haciendo mucho esfuerzo para aguantarme, para seguir mamando, para poder compartir juntas esos momentos tan bonitos. Para mi tenerla en mi regazo, mirarla, ver sus ojos marrones enormes mirarme, me parecía maravilloso. Pero cuando mamaba veía las estrellas.

Alguna vez lloré, lloré de impotencia, de rabia, de no poder controlar mi propio cuerpo. Me sentí pequeña y un poco inútil, pero seguí intentándolo por ella, por mi, por ambas. Y lo conseguimos, seguimos adelante y estuvo mamando cada día hasta que nació su hermano. Fue duro para las dos, pero lo conseguimos juntas y estoy orgullosa de ambas.

Como cada momento de su vida la voy acompañando y guiando en sus decisiones, y su decisión fue continuar la lactancia, aún resultándole tanto o más duro a ella que a mi, pero siguió. Y al final del todo del embarazo empezé a tener un poco más de leche y a no molestarme tanto. Disfrutamos de nuevo juntas y compartimos nuestros últimos momentos a solas, porque a punto estaba de entrar en nuestra vida mi Pequeñín y a la pobre le quedaba lo más duro en su vida hasta el momento, compartir su bien más preciado. Lo que durante 20 meses había sido para ella sola, lo que había disfrutado cada día de su vida junto a mi, por lo que había luchado con tanto tesón y ahínco, esos momentos ya no iban a ser para ella sola y eso fue un duro golpe para ella.

A día de hoy llevamos casi 2 años de exitosa lactancia materna, a falta de 6 días para completarlos, con nuestro momentos buenos como duros. Y me emociono contando estos momentos tan íntimos nuestros. Y porque no cambiaría ningún instante de los que he pasado con ella disfrutando y compartiendo a su lado. Porque siento que he de darle las gracias por aguantar, por ser más borrica que yo, por querer algo con tanta pasión como para aguantar aquellas tomas en las que su madre se ponía nerviosa. Siento que tengo que pedirla perdón y darle las gracias por ser como es, por hacerme sentir la mamá más afortunada del planeta. GRACIAS MI BICHITO!!!

A falta de 6 días por completar los 2 años, los que recomienda la OMS, la AEPED, sé que ella seguirá más. No sé cuanto, pero desde luego que ha luchado mucho como para perderlo y eso que tiene que compartirlo y lo hace con dulzura, con amor. Seguimos teniendo nuestros momentos a solas y su lactancia sigue siendo complicada.

Pero esto os lo contaré otro día...

martes, 12 de julio de 2011

Poca paciencia

Las últimas noches en casa están siendo malísimas. Desde que mi Bichito llegó malita el viernes, están siendo horribles.

La ñoñería se ha apoderado de ella. Está todo el día encima, llorando, gimoteando y se despierta varias veces en la noche. Yo lo achaco a los dos colmillos que la están saliendo y otro dientecito abajo.

Encima mi Pequeñín se ha unido a ella y se está despertando cada hora. La noche del viernes dormí poquísimo. A las 21:00 se duerme mi Pequeñín, a las 21:30 mi Bichito y preparamos la cena y mientras estamos cenando mi Pequeñín se vuelve a despertar. Quizá su nivel de leche no esté hasta los topes, así que le doy tetita tumbados en la cama y a dormir. Vuelvo a terminar de cenar, intercambio de masajes mientras vemos la tele y yo me quedo traspuesta en el que me da mi marido, estoy agotada. Me arrastro a la cama, paso a mi Pequeñín a la minicuna y me acuesto.

Aproximadamente a las 3 me despierta mi Pequeñín, le doy tetita y a partir de ahí se despierta cada hora o menos, toma un poquito y se vuelve a quedar frito. Y yo no consigo dormirme. El viernes mi Bichito tuvo hasta 39 de fiebre, así que estuve tumbada con ella en su cama esperando a que la bajara y mi Pequeñín se despertó 8 veces!!! El sábado mi Bichito se despertó también un montón de veces y mi Pequeñín 5, así que desde las 3 sin dormir. El domingo más de lo mismo, eché a mi Pequeñín en su minicuna para ver si yo conseguía descansar, pues casi peor. Y esta noche ya ha sido el remate, mi Bichito se ha caído de la cama y yo casi no me mantengo en pie.

Encima se despierta y se tira todo el rato llorando: "Mamá aquí, noooooooooo, aquí". Debo de estar un centímetro descolocada y se pone a llorar y me despierta a mi Pequeñín. El pobre no consigue descansar, mi Bichito no le deja y por las tardes cuando vuelve de la guarde el pobre no consigue cerrar los ojos ni 5 minutos.

Mi paciencia se está acabando, está bajo mínimos. Hasta que no despierta a mi Pequeñín cada mañana antes de irse, no se queda a gusto. Y a mi se me descompone el cuerpo de verlo. Imagino que el no descansar está haciendo mella, no llego ni a cuatro horas diarias de sueño y me siento agotada, cabreada, malhumorada, baja de moral, como deprimida y encima me siento mal.

Esta mañana ha tenido que vestirla mi marido, porque yo no podía soportar sus lloros, que no callase, que despertara a su hermano. Y lo ha conseguido, vaya que si lo ha conseguido. Ahora le tengo aquí conmigo, comiendo tetita mientras escribo.

Hoy nos vamos a quedar en casa e intentaré echarme cuando se duerma mi Pequeñín. Los dos en la camita, a ver si así consigo descansar, porque lo necesito, no sabéis cuanto. Mi estado de nervios está en nivel rojo y sólo necesito unas horas de sueño para recuperar mi alegría y mi paciencia, que estoy a punto de perderla.

Os recuerdo el concurso de los 5 kit de playa, que no se está apuntando casi nadie y sólo tenéis que contarme una anécdota de este verano en el agua. Podéis hacerlo hasta este viernes a las 14:00.

viernes, 8 de julio de 2011

Babykini de Dodot, llévate un kit de playa y quizá... ¡una experiencia única!

Imagino que la mayoría de vosotros conocéis los bañadores desechables, yo los utilizo desde que mi Bichito empezó con 6 meses la matronatación.

Y es que para evitar escapes inesperados en el agua necesitas un pañal y los bañadores desechables Babykini de Dodot son una buena opción porque protegen a tu bebé dentro del agua, sin hincharse como los pañales.
1. Exclusivo material absorbente. No se hinchan como los pañales.
2. Laterales elásticos pre-punteados para una fácil apertura.
3. Doble elástico anti-escapes en la entrepierna.

Además son muy cómodos, se suben y se bajan fácilmente como si fuera una braguita, sin necesidad de cintas.
Cintura y laterales suaves y elásticos que se adaptan perfectamente al cuerpo de tu bebé, proporcionándole mayor comodidad.
Costuras laterales fáciles de rasgar, en caso de caquitas.
Y con los divertidos diseños de Barrio Sésamo®, para que tu bebé disfrute llevando su bañador Babykini de Dodot (a mi Bichito, ¡le encantan!).

Podéis encontrarlos en talla 3/4 (7-15 kilos) y talla 5 (14-18 kilos).

Y si en su primer baño no ha habido "accidentes", puedes volvérselo a poner... ¡son reutilizables!

Para promocionar esta campaña Babykini de Dodot regala 5 kits de playa para los más pequeños. ¿Cómo conseguir uno de ellos? Pues muy fácil, sólo tienes que dejar en los comentarios una anécdota divertida que hayas tenido con tu bebé dentro del agua, tu nombre o nick y tu correo electrónico (si no quieres publicar el email, mándamelo a construyendounafamilia@gmail.com).

¡Las 5 mejores anécdotas ganarán un kit de playa!

Además un lector y su bebé estarán invitados a vivir una experiencia única en una piscina en Madrid el sábado 23 de julio de 11h a 17 h y poder conocernos en persona. Habrá juegos para los más pequeños, clases de matronatación, charlas, regalos y muchas sorpresas más. El transporte del lector y el bebé está incluido.

El concurso estará abierto desde ahora mismo y hasta el próximo viernes 15 a las 14:00. Ese mismo viernes publicaré los ganadores tanto del kit de playa y como del ganador de la experiencia Dodot. Sintiéndolo mucho está restringido a territorio Español. Os agradeceré muy mucho si podéis divulgar el concurso.

¡Será una oportunidad para conocernos y relajarnos con una comida en buena compañía! ¡Podremos vivir juntos una experiencia inolvidable este verano de la mano de Babykini de Dodot!

Gracias a Dodot, los lectores y los blogers estamos un poquito más cerca.

Yo estoy deseando ir... ¿quien me acompaña?

jueves, 7 de julio de 2011

Radar mega-hiper-super sensible

Y es que mi Pequeñín tiene un radar ultrasensible.

Empiezo con el baño a las 20:00 y a las 20:30 ya estamos en la cama tomándose la tetilla. Le gusta comer tumbados en la cama, imagino que el calor le molesta cuando su cabeza está sobre mi brazo y le gusta más el calor que desprenden nuestros cuerpos juntitos. Le gusta hacerse un ovillito y meter sus piernas entre el ángulo de 90 grados que forman mi tronco y mis piernas. Le gusta y me gusta. Come durante un ratito y luego se va quedando dormido poco a poco. Hay veces que me da la sensación de que come menos que cualquier otra toma del día, sin embargo, no me pide hasta 6 horas después.

Cuando se duerme, le dejo ahí, en mi camita y cuando yo voy a acostarme le cambio a la minicuna. Antes había veces que se despertaba, ahora ya no. Y duerme hasta las 3:00 más o menos en su minicuna. Cuando se despierta para comer, le paso a la cama conmigo. Le miro, me encanta verle comer bajo la tenue luz del reflejo de las farolas que entra por la ventana. Doy gracias cada noche por tener dos hijos maravillosos y un marido a los que quiero con locura.

Se duerme y entonces es cuando se activa el radar. Si voy al baño, se despierta y me reclama, si voy a beber agua, se despierta y me reclama también. Es decir, que no puedo salir de la cama. Me tumbo con él, un poquito más de teta y a dormir. Pero este radar no es tan fino como el que se activa a las 7:00 de la mañana. Ese ni los aparatos más potentes de la Nasa consiguen tanta precisión. Sobre las 6:30 es la última vez que se despierta antes de que me levante yo, come mucho y yo ya me quedo admirándole y esperando escuchar la vocecita de mi Bichito diciendo: "Mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá, mamá".

Mi Pequeñín está totalmente dormido a mi lado, de hecho ya no tiene el pecho en la boca y ni se mueve. Ojos cerraditos, respiración rítmica. Me levanto cuidadosamente para ir a ver a su hermana y darle lo que tanto reclama, no es a mamá no, es la teta. Su padre está con él. Según apoyo el culo en la cama de mi Bichito escucho a mi Pequeñín que hace sus ruidos característicos, como si fuera un gatito. Y es que no hay mañana que se quede dormido. Y dejarle camisetas con mi olor no vale de nada. La parte de las sábanas donde duerme es mi lado, por lo que huele a mi. Sabe perfectamente que no estoy y no quiere quedarse sin mi. Doy el pecho a mi Bichito, la visto para ir a la guarde y me acerco a verle. Me regala una sonrisa nada más verme, sus ojos se abren y brillan con un intensidad que iluminan mi corazón.

Qué maravilloso poder disfrutar del primer momento de su día, el de ambos. Los dos siempre me reciben con una amplia sonrisa que ilumina sus oscuras habitaciones. Es un pena que dentro de poco más de dos meses me pierda este momento cada día que tenga que ir a trabajar. Por fin lo recuperará mi marido, que debe de estar deseándolo.

¿Os ha pasado con vuestros pequeños? El radar de mi Bichito no era tan potente y desde luego no tan inmediato.

miércoles, 6 de julio de 2011

Visita al veterinario

Y es que en Madrid tenemos la suerte de contar con un veterinario (es biólogo molecular, pero yo siempre le he llamado así) muy especial. Las mastitis en las vacas son tema de estudio. ¿Por qué? Porque si una vaca tiene mastitis no produce y si no produce, el ganadero o señor que ordeña las vacas, pierde dinero.

Así que existe fines meramente económicos para estudiar las mastitis en las vacas. En las mujeres no merece la pena, total ¿quién sale perdiendo, nuestro futuro? Sin embargo, este profesor también se dedicó a estudiar las mastitis en las mujeres y con el paso de los años y haciéndose una eminencia en este campo, desarrolló una cepa para tratar las mastitis en las mujeres. Esta cepa la probé yo con mi Bichito porque tenía algunos pinchazos en los pechos y es lo que la matrona definió como mastitis oculta. Por desgracia esta cepa le dio diarrea a mi Bichito y tuve que suspenderla.

Uno de los primeros consejos que me dio Eloísa, del blog Una maternidad diferente, cuando tuve la primera mastitis fue que fuera a verle, que me analizara la leche y tomara los probióticos (la cepa de la os hablo). Como la otra vez le dio a mi Bichito diarrea, preferí no ir. La segunda vez que tuve mastitis, como mi Pequeñín estaba en el hospital, ni se me ocurrió ir a ningún sitio. Pero 3 mastitis en 3 meses han hecho que ayer fuera al veterinario.

Me llevé a mi madre para que cuidara de mi Pequeñín mientras me tomaban muestras y me explicaba algunas cosas. Me dijo que seguramente mi Pequeñín hacía tomas muy largas y frecuentes, dado que mis conductos galactóforos estaban obstruidos por bacterias que proliferaban en mayor cantidad de la habitual en mi leche. Me explicó que por suerte, y gracias a mi Bichito, conseguía desatascarlos un poco, pero que son bacterias que se regeneran con bastante rapidez.

La cepa de ahora es mucho más estable que la que tomé yo hace dos años. Además se comporta muy bien a temperatura ambiente y está hidrofilizada, es decir, que se puede congelar. Esta vez viene en cápsulas con la dosis exacta, se recomienda guardar en el frigorífico e ingerir con lácteos.

Debo de empezar a tomar 3 veces al día, después del desayuno, la comida y la cena. Después si me encuentro mejor, eliminar la toma de la comida y si la evolución sigue siendo favorable, la del desayuno.

La cepa que me ha dado es una mejora de la cepa que va a comercializar un famoso laboratorio, creada por su equipo, por supuesto. De todas formas me la van a mandar también para que la tenga por si la necesito.

En 4 días debo de notar mejoría y a la semana tengo que encontrarme mucho mejor. Sólo espero que en este cuarto mes no se repita la mastitis. Ya os iré contando cuáles han sido los resultados del estudio y cómo me voy encontrando.

martes, 5 de julio de 2011

Desistimos

Y es que cuando algo se le mete a un bebé o a un niño en la cabeza, es casi imposible que consigamos quitárselo.

Como os conté hace casi dos meses aquí decidí ponerle el chupete a mi Pequeñín. Es un bebé que necesita succionar todo el rato y además intentaba llevarse el dedo en la boca. Así que le poníamos el chupete, pero le daba alguna arcada y si podía prefería darle la teta. A los pocos días, mi Pequeñín era capaz de quitarse el chupete y meterse el dedo en el momento que te dabas la vuelta y los chupetones que daba a su dedito retumbaban en toda la casa.

Lo hemos intentado de todas formas, con una tetina, con otra. Quitándole el dedo y poniéndole el chupete y la mayoría de las veces cogía el chupete, pero su afán es meterse el dedo en su boca.

Y yo sé por experiencia propia que el dedo está muy rico. Y es que dejé de chupármelo a los 7 u 8 años, por lo que entiendo perfectamente a mi hijo, pero no quería que siguiera mis pasos. A mi me tranquilizaba y me ayudaba a conciliar el sueño. A mi hijo también le relaja y le ayuda a dormirse, porque él sólo no lo consigue, se pone muy nervioso, tiene que succionar algo para dormir.

Me da rabia, pero le comprendo. El mayor problema estaba sobre todo cuando íbamos en el coche. Se intentaba chupar el dedo, se lo quitabas y se cabreaba y le ponías el chupete, el cabreo era monumental y si encima se le caía el chupete, ya ni os cuento. Nos daba mucha pena escucharle llorar y alguno de nosotros se ha quitado el cinturón unos segundos para ponerle el chupete. Al final decidimos que en el coche no le quitábamos el dedo y después de insistir e insistir con el chupete, hemos desistido y ya lo hemos dejado.

Si está el chupete y le vemos que lo coge, se lo damos. Si tiene el dedito en su boca y está dormido, se lo quitamos muy suavemente, de hecho se le cae solo. Pero ya no nos obsesionamos con que no se chupe el dedo, si lo necesita y es lo que quiere, pues que lo haga, ya atajaremos el problema cuando llegue, si llega.

Eso sí, está riquísimo con el dedo en la boca, me recuerda tanto a mi...

domingo, 3 de julio de 2011

Echo de menos...

Cuando voy al taller de post-parto, que aunque ha acabado, nosotras seguimos reuniéndonos una vez en semana, lo hago paseando. Me gusta pasear y tener un rato para pensar en mis cosas. Entre el centro de salud y mi casa hay aproximadamente 35-45 minutos andando y desde que me quedé embarazada de mi Bichito, disfruto recorriéndolos dando un paseo con mi Pequeñín en el fular. El paseo no es demasiado agradable, no es que atraviese un bonito parque ni haya sombras en las que resguardarse de este calor, pero me gusta.

El viernes pasado iba pensado y recordando cuando mi marido y yo éramos novios. Intentamos hacer varios viajes antes de tener hijos y así aprovechar y visitar algunos lugares que con ellos no lo podríamos hacer hasta que fueran un poco más mayores. Sé que podemos viajar, aunque de forma diferente y eso no lo echo de menos. Lo que echo de menos es bucear. Recuerdo muchos momentos en los que disfrutamos juntos de la mano bajo el mar, admirando el mundo marino, algunas inmersiones en especial.

En nuestro viaje de novios, nos fuimos a Las Islas Maldivas y pudimos observar en una de nuestras inmersiones, agarrados fuertemente a las rocas en el fondo del mar, el baile de las mantas. Justo cuando decidimos ser padres, nos fuimos a la República Dominicana a bucear, dado que yo no podría hacerlo en mucho tiempo, y recuerdo con especial cariño dos inmersiones, una a un barco hundido a 40 metros de profundidad y otra cuando vimos un pez globo y lo tuvimos en nuestra mano.

Desde entonces no he vuelto a bucear y lo echo de menos. El equipo pesa mucho y no creo que merezca la pena tener un susto dando el pecho a mis hijos y tampoco siento una necesidad imperiosa. Mi Bichito y yo hemos acompañado a mi marido una vez, pero, sin embargo, parece que para él ha perdido mucho interés dado que no puedo compartirlo conmigo. Sé que le gusta, pero no quiere hacernos recorrer largas distancias en coche para que él haga dos o tres inmersiones. Lo único es que sé que todavía me queda tiempo que esperar, porque no es un deporte que puedan practicar los niños. Cuando lo practiquen tienen que ser muy responsables y hay que asumir riesgos que, bajo mi punto de vista, no son compatibles con niños pequeños y tampoco con muchos adolescentes.

Otra cosa que echo de menos es tomarme una cerveza de trigo, una Weissbier. Me gustaba mucho tomarme una antes de comer y ahora con este calor, me encantaría hacerlo. Pero no conozco ninguna sin alcohol, así que me tengo que conformar con mi 0,0.

También echo de menos arreglarme y verme guapa, tener un poquito de tiempo para mi. Sin embargo, dejar de fumar y los embarazos me han dejado con unos kilitos de más y no me gusta cómo me queda la ropa. El peso de mi Pequeñín lo he perdido por completo y del de mi Bichito me quedan un par de kilos, pero los 4 kilos que cogí dejando de fumar son los que veo muy muy lejanos. Y es que hay días que me veo mejor que otros, pero cuesta reconocerse en el espejo.

Pero lo que tengo claro es que no cambiaría mi situación actual por nada del mundo, ni una sola milésima de segundo. Soy una mujer feliz, segura, madre, esposa, me siento deseada por mi marido y por mis hijos y muy querida por los tres. Y no hay cosa más maravillosa en el mundo que levantarme cada mañana a su lado, compartir los días y las noches, disfrutar de ellos, verlos reír, verlos llorar, escuchar cómo suena mi nombre en sus labios o Mamá o el sonido de gato que hace mi Pequeñín para llamarme, sentir que me necesitan y que yo les necesito a ellos. Cada momento de mi vida es para ellos y es fantástico poder compartirlo.

Y no me siento mal por echar de menos algunas cosas, porque me hace sentir bien y saber valorar las que tengo ahora. Para todo existe su momento y yo no he sacrificado nada, simplemente he aplazo algunas, porque de lo que estoy segura es que alguna vez os contaré nuestra primera inmersión en familia.

Besitos y feliz semana.

viernes, 1 de julio de 2011

Las Redes Sociales han llegado a Construyendo una Familia

Hace poco abrí mi perfil en Twitter y lo intenté en Facebook. Pero exportar un blog y que quede correcto es harto complicado en Facebook, de hecho, ha exportado las que le ha dado la gana. Así que me he dado de alta en un programa que actualiza en ambas redes sociales. La dinámica es sencilla, yo publico en el blog y se actualiza automáticamente en Twitter y en Facebook.

Me creé un perfil en Twitter hace poco más de un mes y aunque me ha costado un poco decidirme, porque cada vez tengo menos tiempo y más cosas que hacer, al final me he liado la manta a la cabeza y después de configurarlo una docena de veces, he abierto la página en Facebook.

Os animo a seguirme en Twitter como Constru_Familia y a apretar el botón de Me gusta de la página Construyendo Una Familia en Facebook. Además, me he creado un perfil en Facebook y así poder ser también vuestra amiga y poder compartir juntos nuestras experiencias. Soy Suu Bichito Pequeñín.

Eso sí, si algo no funciona bien, por favor, decírmelo, porque yo soy nueva en esto de las Redes Sociales.

En la columna derecha de mi blog, debajo de los seguidores, tenéis los enlaces tanto para Twitter como para Facebook. Os los adjunto aquí:





Os deseo un buen fin de semana a todos y a los que hoy empiezan sus vacaciones, que disfruten mucho y que se diviertan!!!