miércoles, 30 de junio de 2010

El embarazo de mi bichito: segundo trimestre


Entramos en la semana 12 y todo iba perfectamente. Lo comuniqué en el trabajo, ya me encontraba mejor de los mareos y las bajadas de azúcar y por fin podía decir que ya había pasado el peligro. 10 días después, fui al baño en el trabajo y estaba manchada de sangre. Oh, dios!!! Mi bichito, podría haberla pasado algo? Así que nos fuimos al hospital y allí me dijeron que no ocurría nada, pero que me quedara en casa haciendo reposo relativo. Así que eso hice. La ginecóloga decidió esperar 4 semanas a que me hicieran la eco de las 20 semanas para ver que todo era correcto. Así que el 4 de febrero de 2009 me dieron la baja.

Había empezado a ir a natación de embarazadas, así que falté una semana y luego volví a retomarlas. Pero a finales de febrero, semana 19 de embarazo, me levanté una mañana de sábado, abrí los ojos y me veía la cara. Tenía unos dolores espantosos en la boca, fue horrible. No podía tomarme nada y tenía todo un lado de la cara hinchado. Alguna muela de debajo de un puente de tres estaba dando guerra. Y el paracetamol no hacía nada de nada. Después de aguantar todo el día, después de pedirle a mi marido que me quitara el puente, después de llorar del dolor que tenía, decidí ir al hospital. Tenía una infección muy considerable, así que antibiótico y hielo en la cara.

A la semana siguiente fui a hacerme la eco de las 20 semanas, todo estaba bien, pero mi médico de cabecera no me daba el alta, en gran medida por la infección de la boca y porque quería que fuera mi ginecóloga la que me la diera.

Empecé a arreglarme la boca lo que pude. Con mucho cuidado de poner el mínimo de anestesia y aguantar el dolor como podía. A finales de marzo me dio otro dolor de muelas, al lado contrario, así que más de lo mismo, hinchazón de cara, dolor, etc. El médico de cabecera decidió entonces dejarme de baja hasta que terminaran de arreglarme la boca, que sería a la semana siguiente de Semana Santa.

Esa semana además de acabar con la boca, tenía que arreglar unos papeles para la declaración y el nacimiento del bichito, así que como el viernes por la tarde iba a por el alta, por la mañana fui a hacienda. Y después de cambiar el domicilio quise ir a ver a mi madre. Así que tomé la salida en dirección a su trabajo y un coche negro BMV me estaba achuchando por detrás, calculé mal al tomar la salida y me choqué contra un coche. Me saltó el airbag y empezó a entrar humo. Me dolía la tripa, tenía un golpe y mi pequeña no me daba ninguna patada y justo 5 minutos antes no paraba. Fue la peor sensación del mundo, no la sentía.

Algunos coches pararon al verme la tripa cuando salí y me ayudaron. Me levanté la camiseta y tenía una laceración alrededor de mi ombligo. Un golpe que se estaba amoratando. Me dolí la tripa y sobre todo el alma, porque no sentía a mi pequeña. Fue horrible el tiempo en la ambulancia y los minutos hasta el hospital. En cuanto llegué me llevaron corriendo para ver en qué estado se encontraba y justo me dio una patada. Mi bichito estaba bien, no la había pasado nada. El golpe de la tripa era del airbag, que cuando salta quema. Fue entonces cuando empezó a dolorme todo, las costillas, las piernas, el cuello, las cervicales, las vértebras, la clavícula. Tenía moretones por todos los sitios del cinturón de seguridad y menos mal que llevaba el de embarazada. Así que me miraron, vieron que lo que tenía no estaba roto y me mandaron para casa. No podían hacerme nada, ni radiografías, ni medicación, ni nada. Así que un globo para las costillas y las vértebras que estarían fisuradas porque me costaba respirar, descanso y reposo. Pero mi pequeña estaba bien, menos mal.

Estuve semanas sintiéndome culpable, podía haberla pasado algo a ella. Así que lloraba a veces, pero estaba feliz porque seguía conmigo. No podía apenas moverme, había siniestrado el coche de mi madre porque el mío lo estaban pintando, pero mi pequeña estaba bien y me sentía feliz por ello.

Como podéis imaginar ya no me dieron el alta...

El accidente fue el 17 de abril, y estuvimos semanas que parecía una viejecita. Me costaba respirar, me costaba moverme y claro, cada vez estaba más gordita.

Tres semanas después comenzaba el tercer trimestre y aunque más gorda, tenía la esperanza que aunque estaría pesada y haría mucho calor (salía de cuentas el 27 de julio), por lo menos no me pasaría nada más. Pero me equivocaba...

martes, 29 de junio de 2010

El embarazo de mi bichito: búsqueda y primer trimestre


Ayer, LadyA, en su blog La Mamá Vaca, preguntó qué tal nos había ido en el embarazo. Así que hoy me he decidido ha contarlo.

Siempre quise ser madre, así que sólo tuve que esperar a que mi marido también lo deseara. Y cuando lo decidió, dejamos ambos de fumar, era agosto de 2008. Antes de quedarme embarazada quisimos hacer un viaje de buceo dado que después no podría sumergirme. Y nos fuimos 15 días a La Romana (en la República Dominicana) y estuvimos buceando la mayoría de los días. Además también debía ovular en el viaje, así que quizá nos traíamos un regalito de allí.

Al final vinimos solitos y me bajó la regla el 20 de Octubre. Tres semanas después empezó a dolorme el pecho. Era un dolor distinto, así que supe que algo había cambiado. Esperé justo al día que debía bajarme la regla y con el primer orín de la mañana, me hice la prueba. Salió una clarísima línea y otra muy oscura, pero había dos líneas. Así que me hice otra prueba para comprobar y salió exactamente lo mismo. Estaba embarazada. Yupyyyyyyy!!! Ese día fue maravilloso, no había forma de quitarme la sonrisa de la cara. Estaba muy feliz.

Yo siempre he tenido reglas muy dolorosas, de las de caerme al suelo y no poder moverme. A veces me descomponía de tal manera que me daban hasta cólicos. Así que yo creí que embarazada iba a estar mejor. A mi nadie me había dicho que quedarse embarazada doliera. Y dolía, pero era muy feliz. Excepto por algún que otro mareo, alguna que otra náusea y sobre todo el cansancio total diario, por lo demás el trimestre fue bastante bien. Sólo vomité dos veces en todo el trimestre y fue porque algo me había sentado mal.

De hecho, estuvimos en Londres 5 días en el puente de Diciembre y, aunque las bajadas de azúcar a veces me dejaban k.o., anduvimos mucho y pudimos visitar y disfrutar de casi toda la ciudad.

Las navidades fueron felices. A mi me ponían muy triste dado que mi padre no nos acompañaba, pero el año del 2008 fueron especiales y mi bichito recibió muchos regalos de Papá Noel y de Los Reyes Magos.

Estaba deseando comenzar el segundo trimestre, dado que me habían dicho que me encontraría mejor de las náuseas, los mareos y el cansancio.

Ilusa de mi, nada parecido a la realidad... (mañana el segundo trimestre)

lunes, 28 de junio de 2010

Salidas en fin de semana


Mi marido y yo tenemos distintos gustos: a él le encata estar en casa y a mi al contrario, me gusta salir, pero nunca habíamos notado tanto la diferencia.

Algo tendría que ver que cuando éramos novios y salíamos a cenar o a tomar copas o a que yo bailara, luego necesitábamos el resto del fin de semana para recuperarnos. Siempre nos ha encantado viajar, a los dos. Así que aprovechábamos cualquier posibilidad para conocer otras ciudades, otros países u otros mares (salíamos a bucear). Así que cuando nos casamos decidimos hacer todas las escapadas que pudiéramos para después quedarme embarazada. Así que, además de todo el turismo nacional que hemos podido hacer, hemos visitado Cancún, La Romana en La República Dominicana, Las Maldivas, Londres, Munich y un viaje por toda Jordania. Nos queda mucho por ver y mucho por hacer. Eso sí, en cuanto podíamos nos íbamos a la playa.

Ahora, hay muchas cosas que hacer en casa. No sólo lavadoras, ropas y demás, sino arreglar la terraza, poner el suelo, techar el ático... En definitiva, dedicarle más tiempo del que quisiéramos. Así que ya no podemos salir tanto y, lo que es peor, si salimos, no podemos hacerlo juntos. Esto nos ha llevado a alguna discusión que otra, pero nada que no se pueda arreglar con una buena conversación y un poco de paciencia.

Así que este fin de semana hemos aprovechado, mi bichito y yo, para ver a algunos de mis amigos. Aunque nos gusta más que venga papá con nosotras, nos hemos dado cuenta que no siempre puede acompañarnos. Nos importa, pero lo entendemos.

Este fin de semana me hubiera gustado ir a la playa, pero no va a poder ser. Seguro que se me ocurre alguna otra cosa que podamos hacer...

¿Os ha ocurrido a vosotr@s lo mismo? ¿Salís mucho menos?

sábado, 26 de junio de 2010

Niños y niñas


Ayer fue el cumpleaños de mi hermano y fui a verle. Fui más que por verle a él, por ver a mi sobrino de 3 añitos, que es super rico.

Cuando ves a un niño y a una niña junta es cuando te das cuenta de las diferencias que existen entre ellos, pero ya desde muy muy pequeños. Mi sobrino es un amor, muy cariño y muy risueño. Así también es mi bichito. Sin embargo es un burro. Coge carrerilla para tirarse encima de mi hermano, salta y se tira de espaldas, te pone la cabeza para que le tires a lo pressing catch y le des una voltereta en el aire. Y luego ves a mi bichito, que coge las cosas con mucha suavidad, que te acaricia y te sonríe con esa dulzura especial (cómo se nota que soy su madre)

Pero es verdad, qué de diferencias hay entre ellos!!! Yo recuerdo que cuando era pequeña (mi hermano y yo nos llevamos 3 años y medio y él es el mayor) siempre jugaba a indios y soldados con el fuerte de playmobil. Casi siempre, me tocaba ser los indios y claro, pues perdían. Pero cuando alguna rarísima vez me tocaba ser los soldados, yo siempre estaba segurísima de que esa vez me tocaba ganar, pues no sé cómo se las arreglaban los indios, que me ganaban. Jamás recuerdo ver a mi hermano jugar con muñecas. Bueno sí, para quitarles la cabeza y tirarlas a la taza del water.

Y eso fue lo comentó mi hermano que le habían dicho en la guarde, que los niños desde bien pequeños juegan con pistolas y a pegarse y, sin embargo, las niñas no lo hacen.

¿Habéis visto esta diferencia vosotr@s?

viernes, 25 de junio de 2010

De compras


Madre mía qué tarde la de ayer.

Como ya os conté mi bichito va a matronatación desde que tenía 7 meses. Vamos tres vecinas con nuestros respectivos enanos y uno de los enanos va con mi bichito a la guarde. Así que esa mamá y yo decidimos ayer ir a comer y de rebajas, dado que algunos establecimientos ya habían empezado.

Así que nos dirigimos a las distintas tiendas. A la primera tienda que fuimos nos probamos unos pantalones. Qué mal nos quedaban a las dos!!! A la segunda, unos vestidos. Vamos, que peor no podíamos estar. Así que al final terminamos comprándonos unas gafas de sol (esas, por suerte, se amoldaban perfectamente al contorno de nuestro cuerpo)

No me veo con nada. O mejor dicho verme me veo, pero demasiado. Lorza por aquí, lorza por allá. Vamos que no hay manera. Cuando yo me quedé embarazada pesaba 59 kilos, pero es que ya había cogido 5 kilos al dejar de fumar. Y aunque en mi embarazo cogí 11 kilos, ahora no tengo manera de soltarlos. Al poco de parir, a las dos semanas, pesaba 62 kilos y ahí me he quedado. No hay manera de que baje (claro, que no me privo de nada). Pero me da mucha rabia, porque desde que parí tengo muchísima hambre.

Recuerdo el día que di a luz, madre mía qué hambre empezó a entrarme. Imagino que algo tuvo algo que ver que el bichito no parara de ordeñarme.

La verdad es que llevo toda la vida preocupada por el peso. He llegado a estar muy delgada, pero es que he pasado de una 38 a una 42 y, claro, eso, en la autoestima de una mujer, pues hace mella. A veces pienso, tengo que ponerme a régimen, pero claro, quiero quedarme embarazada de nuevo y tampoco veo mucho sentido sufrir para nada.

Lo peor que llevo es ver a algunas mamás con esos cuerpos de escándalo, dos churumbeles pululando por sus alrededores y uno más en brazos (así hay alguna en mi vecindario). Me cachis, que así una no puede bajar este año a la piscina. Si por lo menos pudiera decir: "Sí, bueno, es que estoy otra vez embarazada". Aunque sea de unas pocos semanas, parece la excusa perfecta.

Desde luego este año ni de coña me pongo un bikini. Vamos, que mi ombligo va a tener que decir: "Dejen salir, apártense, que quiero tomar el sol!!"

Y vosotras qué tal os habéis quedado? Espero que mejor que yo...

jueves, 24 de junio de 2010

Máster en parques


El lunes tenía intención de dar una vuelta por el barrio. Bichito ya ha hecho los 11 meses y dado que ya ha llegado el calor, quería ver a qué parques de la zona les daba la sombra y si había algún juego para ella.

Este fin de semana estuvimos en un parque en el que había unas cestitas en los columpios, especialmente para los más pequeños. Así que después de esperar su turno, la monté y la encantó. Al día siguiente fuimos a casa de su abuela. En la parcela tiene un parque infantil con columpios (uno es para bebés), tobogán, una casita, una mesita, balancines, un caballito y hasta una fuente. Así que disfrutó muchísimo y el columpio fue lo que más le gustó. Fue por esto, por lo que decidí ir el lunes a pasear por el barrio para buscar un parque con sombra (como ya os conté acuesto a mi bichito a las 20:30 y con estos calores, necesitamos un parque con sombra)

Así que bajé y me encontré una vecina. Cambio de planes, me quedé hablando con ella y dejé por primera vez a mi bichito en la arena. Se lo pasó genial y resultó una experiencia muy grata. Le comenté a mi vecina lo que me disponía a hacer y ella ya había hecho lo mismo que yo, así que me lo contó. Mi barrio es de nueva construcción, por lo que los árboles tienen casi el mismo tamaño que yo (bueno, no vayamos a exagerar, que yo soy un poco bajita) y están muy pelaos, no sé si alguno tendrá sombra. Por lo que me contó mi vecina, cada parque tiene su "dueño" y así me lo hizo saber: "El que está aquí al lado, es de moros, el de más arriba, de gitanos y el que está al lado del colegio, de Españoles". "Me cachis en la mar, si voy a tener que hacer un Máster".

Lo de los dueños no me ha gustado nada, la verdad. Así que un día que no haga tanto calor, iremos de paseo y buscaremos el único que tenga sombra (si existe). Por nuestra parte, no hay ninguna diferenciación, es decir, todos son niños. Espero que nos acepten de la misma manera, sea cual sea por el que nos decidamos.

¿Qué ocurre en vuestros barrios? ¿Tenéis el mismo problema que yo?

miércoles, 23 de junio de 2010

Risitas


Como comenté ayer con PapáLobo a mi bichito sólo le ha salido un diente. Le empezó a salir a los 10 meses y ya ha salido casi del todo. Cuando se ríe se la ve sólo el dientecillo.

No me digáis por qué, no sé si puede ser porque se ríe muchas veces de la misma forma, con su dientecillo ahí fuera asomando. Pero desde siempre me ha recordado al perro "Risitas" de la serie de dibujos animados Los Autos Locos. Está muy graciosa.
Sin embargo, todo el mundo me dice que les recuerda a una viejecilla, con su dientecito ahí fuera, riéndose la mayoría del tiempo. Ya me lo ha dicho mucha gente. Y no he podido evitar acordarme de El Curioso Caso de Benjamin Button. Esa película me impacto muchísimo. La vi estando embarazada y ver cómo muere un bebé, fue algo muy duro en ese momento. Menuda llorera me dio!! Madre mía!! Además cada vez que lo recordaba, volvía a llorar como una magdalena. Una preciosa película que me gustaría volver a ver.

¿Cuándo la saldrá el próximo diente? No sé, pero yo pienso que podrían salir cuanto antes, porque la pobre no lo está pasando demasiado bien. A veces la noto muy rabiosa. Yo siempre he dicho que no le han salido antes porque no quería hacer daño a mamá, pero debe de quererme demasiado :) A ver si la salen pronto, porque dicen que en verano son más molestos (imagino que las altas temperaturas y el sudor, unido con la saliva tan fuerte, puede irritar todavía más su lindo culito)

¿Y los dientes de vuestros nenes cómo van?

martes, 22 de junio de 2010

Los sueños


Para mi esta palabra tiene dos significados, el real y el ficticio. El real es cuando sueñas con una meta, que ocurra, a corto o largo plazo, algo que va a ser muy importante para ti y va a marcar el resto de tu vida, algo que ansías. El ficticio son aquellos que ocurren por la noche, cuando estás dormida.

Hoy quiero hablar de los reales, de los míos.

Cuando yo era pequeña tenía las cosas muy claras, demasiado claras. Recuerdo una conversación con mi padre cuando tenía 6 ó 7 años. Mi papá me dijo: "Tú de mayor enfermera, para cuidarme" y yo le respondí: "Yo de mayor, matemática". Y ese fue mi primer sueño, Estudiar Matemáticas. Con mucho esfuerzo conseguí entrar en la universidad y, después de muchas adversidades, conseguí mi sueño. Por desgracia, mi padre murió tres meses antes de que me licenciara. Ahora, que hace pocos días han pasado 5 años de su muerte, pude compartir con él cada examen, cuando me llamaba para preguntarme cómo había ido. No pude compartirlo del todo, pero mientras se hizo real, sí.

Según fui haciéndome más mayor, empecé a tener otro: Quería ser madre, sentía un deseo enorme de concebir. Era muy joven para cumplirlo, pero estaba segura que en el futuro lo haría realidad.

Gracias a mi marido pude conseguir el sueño material. Cuando empezamos a salir juntos él estaba a la espera de que le entregaran un piso y debió ser el destino o que sé yo, pero era exactamente lo que yo siempre había soñado, un Ático. Así que el 8 de septiembre de 2007, cuando nos casamos, pude decir que se había cumplido mi otro sueño.

También, gracias a mi marido, pude cumplir mi gran sueño, Ser Madre. El 20 de Julio de 2009 nació mi bichito, el día más feliz de mi vida. Recuerdo a mi madre diciéndome en el baño, justo después de haber parido, con lágrimas en los ojos: "Otro sueño cumplido". Mi padre no pudo acompañarme en este sueño, pero estuvo y está en mi corazón cada día.

Ahora, que ya tengo cumplido los tres, empiezo a tener nuevos. Quiero tener más hijos, construir una familia más grande con la ayuda de mi marido y mi hija.

Pero en este mismo momento, lo que más deseo es que mi hija sea feliz. Levantarme cada mañana y poder verla, poder abrazarla y poder quererla.

Ahora que soy "mayor", que echo la vista atrás y veo, que mis sueños de niña y adolescente se han cumplido, pienso por qué no añadí un cuarto sueño: Que mi papá hubiera vivido para disfrutarlos y compartirlos conmigo.

Te echo de menos papá. Este post va por ti. Te quiero

lunes, 21 de junio de 2010

Piscina, hoy no


Es una pena no poder ir hoy, la verdad.

Mi bichito lleva yendo a matronatación desde que tiene 7 meses. La gusta mucho y disfruta cada día que vamos.

Hoy era un día importante, es el día de la exhibición de natación. Os preguntaréis qué exhibición van a hacer niños tan pequeños. Bueno, pues su profe sólo se ha metido una vez a la piscina y nosotras no fuimos ese día :( Así que hoy se va a meter con ellos y va a construir un túnel en el agua y a hacerles pasar. Yo estaba muy emocionada, me hacía mucha ilusión ver cómo mi bichito se las apañaba con su profe. Además dejaban que entrara otra persona a verla, que iba a ser mi mamá (con cámara incluida)

Pero sigue malita con mucha tos y creo que sería contraproducente llevarla. Así que me he levantado un poco trite, pero qué vamos a hacerle. Cuando no se puede, no se puede. Cuando se lo he dicho a su padre, le ha salido un Ohhhhhh.

Ahora me toca llamar a la abuela y decirla que no, que no va a ver al bichito pasar por el túnel. Seguro que no la importa demasiado, porque ante todo está su bienestar

domingo, 20 de junio de 2010

Signos incompatibles con el embarazo


Cuando decidimos quedarme embaraza por primera vez, fue bastante sencillo. Yo era muy regular (claro, tomaba la píldora). Cada 28 días exactos me bajaba la regla. Así que decidimos intentarlo todos los días. Aunque me dijeron que era bastante difícil por el tema de la píldora, en el segundo mes ya no me volvió a bajar la regla. Así que todo salió a pedir de boca.

Ahora es mucho más complicado. No sé cuando ovulo (tengo que aprender el método sintotérmico de mamá (contra) corriente) y ni siquiera tenemos tiempo para intentarlo tan a menudo.

Pero lo que sí sé, es que hay signos evidentes de que este mes tampoco hemos atinado. Cuando me quedé embarazada de mi bichito, casi no hizo falta la prueba. Una semana antes ya intuía que estaba embarazada por el dolor en las mamas. Este mes me ocurre lo contrario.

Como el mes pasado, una semana antes tengo dolores. Me duelen los riñones y la tripa. Eso ya ha pasado, pero han salido los malditos granos. Parezco una paella!!! Tengo granos en el cuello, en los hombros y cerca de las orejas. Yo lo atribuyo a las hormonas. Si es que soy muy joven y tengo acné juvenil!! El mes pasado, me ocurrió lo mismo, pero no me bajó hasta dos semanas después. Menudas pintas con tanto grano!!! Encima me corté el pelo hace poco, así que tengo el cuello totalmente al descubierto.

Bueno, el mes que viene ya veremos si lo conseguimos. Ahora a esperar que baje lo antes posible.

Hoy mi bichito hace 11 meses. FELIZ 11 MESES BICHITO!!!

sábado, 19 de junio de 2010

El sueño del bebé


Ayer me quedé alucinada. Os cuento a ver si así puedo desahogarme un poco.

Yo vivo en Madrid y he reducido mi jornada a 7 horas diarias para así estar por las tardes con mi bichito. El problema es que en Madrid hay mucho tráfico y yo trabajo al lado de la M-30 (para los que no vivan en Madrid, esto significa que es el último lugar de esa zona en la que se puede aparcar sin tener que pagar). En coche tardo, sin tráfico, 20 minutos y en transporte público 1:30. Así que cuando decidí llevar a mi bichito a la guarde, tuve que ampliar horario y llevarla a las 7:30 (la recojo a las 15:15). Como tengo que llevarla en coche, salgo de casa a las 7:05. ¿Por qué tan pronto? Porque si salgo 30 minutos más tarde, no llego 30 minutos más tarde, sino una hora. Además tardaría muchísimo más en aparcar, dado que a las 8:00 no hay demasiado problema (lo dejo a 5 minutos andando).

A mi me da mucha pena despertar al bichito (11 meses mañana) a las 6:30 (la doy el pecho, la visto y nos vamos), pero no me queda otra. Así que lo que hago es acostarla a las 20:30. Sé que es pronto, pero qué mínimo que duerma 10 horas por la noche. De hecho cuando llegue el invierno la acostaré a las 20:00 para que pueda descansar más. Ella duerme una siesta de 30-45 minutos antes de comer y después de comer de 2 horas aproximadamente. Su sueño me tiene preocupada, porque creo que no duerme lo suficiente, pero me da mucha pena acostarla antes en verano. Mi marido dice que soy muy estricta con la hora de acostar de mi bichito, pero ya os digo que me preocupa mucho sus horas de sueño.

¿Creéis que estoy haciendo algo mal? ¿Duerme mi bichito suficiente? ¿Cómo duermen vuestros hijos?

viernes, 18 de junio de 2010

Bichito con fiebre


Ayer recogí a mi bichito de la guarde con 38 de fiebre. Lleva un par de días tosiendo, así que otra vez la hemos puesto el Pulmicor.

A principios de año la diagnosticaron como "Sibilante feliz". No hubo manera de quitarla los aereosoles hasta finales de Mayo. Sin embargo, ha vuelto a tener tos y la pobre, de tanta que tiene, a penas puede dormir.

Así que hemos decidido que aunque no tuviera fiebre hoy, mejor que se quedara en casa con papi. He llegado al trabajo a las 7:00 de la mañana y me iré a la 13:00 para tomar el relevo. Eso sí, mi bichito se ha quedado despierto después de que le he dado el pecho, a las 6:30, que es la hora de la guarde (pobrecita, vaya horas!!). Ahí ha estado con su padre, imagino que jugando. Ahora ha desayunado y se ha dormido.

Por lo que he podido leer y hablar con alguna otra mamá, este año muchos niños están con aereosoles. Pulmicor y ventolin, mayoritariamente. Mi bichito toma también sobres de singularin en la merienda. La verdad es que yo estoy un poco cansada de tanto aereosol, así que no puedo imaginarme cómo estará mi hija. Es una pena.

Como tenía tanta tos, la he puesto el humificador y alguna amiga me dijo que abriera una cebolla y se la pusiera en la habitación. También la he dado Flutox. Pero estoy un pelín preocupada, porque no puede descansar bien (por la tos)

¿Tenéis alguna recomendación? Gracias

jueves, 17 de junio de 2010

Mi primer post

Después de mucho pensármelo al final me decidí a escribir un blog. Quizá sea porque me gusta leer a otras personas, quizá porque quiera plasmar algunos de los pensamientos que suelo tener, quizá porque a mi marido le gusta leerme o quizá sea porque muchas veces estoy demasiado aburrida en el trabajo y no tengo con quien hablar.
Sea por lo que sea, al final lo he hecho. Así que quiero dedicar este primer post a mi marido y a mi hija, que son los que me soportan cada día. Hablaré un poco de mi, de mis pensamientos y de mis ideas, pero sobre todo de ellos.

Como dice mi perfil, tengo 31 años. Llevo casada casi tres años y siempre quise tener hijos. El 20 de julio de 2009 nació mi bichito y se ha convertido en el centro de nuestras vidas. Soy una entusiasta de la lactancia materna, pero no tanto como lo es mi bichito. Ahora, que después de 18 meses he vuelto "a ser mujer" (no me gusta esta expresión, ¿algún momento dejé de serlo?), quiero volver a vivir la experiencia del embarazo. Para ello hemos de atinar, claro.

Con mi bichito escribí en un semanario lo que ocurría y sentía cada semana. Después del embarazo tan accidentado que tuve (algún día lo explicaré, podría escribir un libro) me gustaría poder compartirlo.

Así que HOLA a los que me leeis (ya tengo un seguidor!!!) y a los que me vais a leer alguna vez (si es que alguien más lo hace)