lunes, 30 de septiembre de 2013

Mi primera semana

Esta primera semana de trabajo ha sido bastante caótica, he estado muy estresada, sobre todo los primeros días.

Estaba tensa, enfadada, a la defensiva y esto no me ha permitido disfrutar de mis hijos todo lo que hubiera querido. He vuelto a casa nerviosa, con muchas cosas que hacer y sin tiempo material para realizarlas. Me está costando centrarme, sobre todo porque dedicar la mañana a hacer curriculum, mirar cursos para refrescar conocimientos anteriores, hacer las fichas de entrada a desasignados y todo lo que te recuerda que estás sin trabajo, es bastante duro. Me encuentro como en tierra de nadie, esperando que mi cv encaje en algún cliente y mi empresa lo presente, que a este cliente le guste mi cv, pero sobre todo, que cuando vea mi reducción de jornada de 6 horas, acepte.

Y es que esta semana he tenido que ver cómo mi compañera, que se incorporó de maternidad hace una semana con reducción de jornada, fue a una entrevista y no cuajó, sin embargo, otro compañero, misma experiencia pero sin reducción, fue aceptado y empieza el lunes.

Me inquieta pasar las semanas allí sin una entrevista. Tener un futuro incierto me tiene desubicada, descontrolada, me produce muchísimo estrés y reconozco que la cabeza se me va pensando en cuánto tiempo estaré allí. Miro a mis compañeros y pienso si llevarán allí mucho tiempo, en cuántas entrevistas les habrán dicho que no, cuántas compañeros han llegado y se han ido y habrán pasado por delante de sus ojos. Miro por mi ventana sin ver, fijo la vista en ese horizonte incierto, en ese futuro impreciso que aparece borroso ante mi mirada.

Cómo me gustaría tener el pincel para dibujar este lienzo, ser yo la que maneja los hilos de esta marioneta y, sin embargo, tengo que esperar a que otros decidan por mí.

Tanto mis hijos como yo nos estamos adaptado a nuestra nueva vida. Pequeñín, desde que desayuna en la guarde, va cada mañana tan contento y Canija, por fin, ha empezado a comer. Aunque separarse de mami por la mañana la produce mucha pena, cuando llego a por ella está contenta. Sé que por muy mal que yo lo esté pasando, ella lo pasa cien veces peor. Sé que ambas nos estamos resignando a estar separadas y necesitamos más tiempo para ello.

Me está costando mucho, pero esto es lo que hay, cuanto antes lo acepte, mejor.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Mi propio banco de leche materna

Mi Canija tiene 6 meses, los cumplió la semana pasada. Previendo que se incorporaría a la escuela infantil este mes, me dediqué el mes de agosto a hacerla un pequeño banco de leche.

Cuando mi Pequeñín se incorporó a la guarde, a las pocas semanas yo no conseguía sacarme toda la leche que él necesitaba, así que se me ocurrió complementar con leche de fórmula. Craso error, Pequeñín desarrolló una alergia a la proteína de la leche que terminó siendo más bien una intolerancia. La leche hidrolizada sabe y huele fatal, así que mi amiga Elo me echó una mano y me traía botecitos de su preciado oro líquido para complementar toda la leche que tomaba mi Pequeñín a lo largo del día, así Darío, Diana y Pequeñín se convirtieron en hermanos de leche. Esta vez no podía pedirla ayuda y sé que si ella hubiera podido lo habría hecho con gusto, pero esta vez Elo está embarazada.

Como la experiencia es un grado y agosto estuvimos en Madrid hice un pequeño banco de leche materna a mi Canija. Casi cada día me sacaba unos 100ml que después congelaba, no sin antes calentarla a 62 grados. ¿Por qué? Pues porque la leche materna tiene una enzima grasa llamada lipasa que ayuda a digerir la leche materna a nuestros bebés y esta enzima hay a mujeres que sigue actuando incluso congelada, de tal manera que cambia el sabor y el olor de la leche materna congelada. Para que esto no ocurra hay que calentar la leche a 62 grados antes de congelarla. Aproximadamente esta temperatura se alcanza cuando salen esas pompitas de aire pequeñitas antes de que vaya a empezar a hervir, alrededor del cazo. En ese momento, se retira del fuego, se deje que temple y luego se congela.

Aunque no demasiado grande, he consigo hacerle un pequeño banco de leche materna a mi Canija. Habrá unas 20 bolsas de congelación para leche materna, por lo que rondará los 2 litros de leche materna.

Ahora mismo no lo necesito, Canija come bastante poco en la guarde porque no acaba de gustarle tomar la leche de la tetita de mamá en biberón, el recipiente no es el mismo, dónde va a parar. Pero me queda la tranquilidad de tener en un huequecito de mi congelador comida para ella. Poco a poco va comiendo más, dentro de nada, si no me dejo partes de mis sacaleches en casa y tengo que hacer extracción manual para vaciarme los pechos, se tomará todo lo que consiga sacarme el día anterior e incluso más. Por suerte la dirección de la escuela infantil le pasa a mi Pequeñín lo que mi Canija no se come y así no se tira nada.

Y ahora os dejo, Canija me llama para desayunar!!! Que tengáis un buen día :*

lunes, 23 de septiembre de 2013

Vuelta al trabajo

Hoy me incorporo a trabajar, primer día después de 10 meses en casa. Tengo un nudo en el estómago y estoy muy nerviosa. Pequeñín está malo, ha empezado a vomitar y su padre va a llevarle ahora al médico. Canija se ha quedado más o menos bien, he preparado 4 biberones, 2 de 80-90ml y 2 de 60ml. Imagino que será suficiente para este primer día sin que mamá pueda acercarse allí si hay algún problema.

El tráfico es horroroso a las 8:30 de la mañana, he ido hilando una mala elección de trayecto tras otra y, como por arte de magia, cuando he llegado he aparcado a la primera. La suerte del tonto, como se suele decir, mañana seguro que no se repite.
Hoy no vuelvo a mi antiguo trabajo, hoy me incorporo a mi empresa desasignada, sin cliente. El gobierno recortó tanto que mi puesto ha sido eliminado dentro de la administración pública y yo me encuentro sin cliente, por lo que he tenido que incorporarme a la sede de mi empresa.  Espero que no tarden en encontrar un lugar para mí. Por lo pronto estoy desasignada, me encuentro desubicada y aunque tendré que hacerme a la idea de que puedo pasar semanas e incluso meses aquí, ahora mismo siento vértigo y mucha presión.

No me esperan buenos tiempos, me esperan días complicados, de muchísima incertidumbre y espero que pronto encuentren un proyecto en el que ubicarme y poder serenarme un poco.

El comienzo no está siendo bueno, Pequeñín malo y Canija sólo come 30ml por toma. Yo estoy de los nervios, llamando a la escuela infantil para saber cómo va Canija, si come algo más, si duerme y pendiente de Pequeñín. Además he confundido el tamaño de las pilas y he tenido que hacer la extracción de forma manual. Tengo el estómago fatal, cómo si tuviera un vacío enorme, el pecho me oprime y me cuesta incluso tranquilizarme.

Ojalá se arregle el día o mejor aún, que den las 15:30 para salir corriendo y poder abrazar a mis tres hijos.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Viendo cambios

Mi mundo gira ahora mismo en la adaptación de los peques a la guarde. Si bien la semana pasada Pequeñín parecía que lo había superado, ayer se agarraba a mí muy fuerte y no quería entrar en su clase. Fuimos a dejar a Canija antes por si se trataba de un tema de celillos o algo, pero que va, él lo que quería era quedarse con mamá.

Llamé a la guarde, pregunté cuando fui a recoger a Canija y me dijeron que tenía ratos en los que se acordaba de mí y lloraba diciendo mami. Para mi hijo es tremendamente dura la separación y sé, sobre todo porque él me lo dice, que se divierte y que hace muchas cosas en la guarde, pero cuando ayer llegué a por él se tiró y me dio un abrazo fuertísimo, por suerte Canija no me acompañaba si no la habría estrujado. Acordamos llevar hoy a Elmo pero ha preferido llevar unos cuentos de animales, sin embargo, al entrar lo ha pasado fatal y despedirse de mí ha sido muy duro para ambos. Es un niño muy alegre y verle llorar de esa manera me parte el corazón, me encantaría poder quedarme con él y con su hermana en casa...

Canija ayer se quedó bien, se consuela en los brazos de su profe y la sonríe, realmente creo que la gusta, lo que me deja más tranquila. Vi cambios en ella, de hecho no les despierta a las 10:30, sino que les deja descansar hasta que ellos mismo se van despertando y le vi ofrecer un bibe a una peque que lloriqueaba aunque no era por hambre. Creo que empieza a darse cuenta que lo importante con bebés es respetar sus ritmos. Me alegra poder haber compartido con ella estos días y quizá mi presencia y mis consejos le hayan servido para darse cuenta que llevo algo de razón. La directora habló ayer con la coordinadora de nivel y por lo visto recibió de buen grado sus consejos, creo realmente que les está llegando y espero que se adapten ellas a los peques y no al revés.

Hoy he llevado mi calienta biberones de leche materna de Medela para la guarde, me quedo más tranquila sabiendo que en todo momento la profe de Canija tiene la posibilidad de calentar su comida porque, si bien la guarde tienen calienta biberones, ayer tardaron 15 minutos en traerlo. Mejor allí que en mi casa, aunque mi marido tenga que calentarlo, él tiene el fuego a mano para hacerlo al baño maría.

Hoy mi Canija se queda hasta las 12:00, tiempo más que suficiente para que su profe le dé un bibe de mi leche. Ojalá vaya bien y coma, si no, el sobrante se lo llevan a mi Pequeñín, que recibe con los brazos abiertos y con una sonrisa en la boca. Es una suerte que me hagan el favor y no desperdicien nada, para mí es muy importante porque me cuesta mucho sacarme la leche. Tengo pendiente hablar de este tema y del banco de leche que he hecho este verano para Canija.

Y vuestros peques, ¿cómo llevan la adaptación? Bichito desde el principio ha ido super bien, de hecho los sábados y los domingos me pregunta si puede ir al cole...

martes, 17 de septiembre de 2013

Adaptación de Canija a la Escuela Infantil

Ir el jueves y el viernes un ratito a la clase con Canija me sirvió de muchas cosas, entre ellas para conocer a su profesora. Según ella tiene feeling con mi Canija, hasta ayer no fui capaz de verlo, pero cierto es que Canija se consuela en sus brazos y que la busca y la sonríe.
Nos ha ido a tocar una profesora sin experiencia en 0-1 y esto se traduce a que no tiene ni idea cómo y cuándo hay que darle leche materna y trata a bebés como si fueran peques. Como os podéis imaginar no me gusta.
Entran en clase y a las 9:15 es su primera siesta, tengan sueño o no, y hasta las 10:30, por lo que a esta hora va levantando persianas y poniendo música. Cuando yo lo supe le pregunté, ¿los bebés no deben de dormir cuando tienen sueño? ¿Por qué les intentas despertar? Intenta establecer con ellos rutinas más propias de niños de 2 años que de bebés de 6 meses.
Yo sé que sabe cómo quiero que se comporte con mi hija, por lo que me centré en lo que no quiero. No quiero que llore, no quiero que nadie le obligue a comer, le sujete la cabeza o le meta un chupete para que trague, no quiero que pase sueño o hambre cuando tiene sueño o hambre, etc, etc. Y parece que esto la molestó porque ante el comentario "Este peque tiene hambre, me ha dicho su madre que se ha comido un bibe a las 7, va a tener que acostumbrarse", yo la dije, "Le vas a dejar sin comer? Va a pasar hambre, por qué no le das un bibe?" Eran las 11 de la mañana y el bebé tiene 8 meses. Así que se sentó a mi lado y me pidió confianza, me explicó que ella no es cruel, que los peques van a llorar pero hasta lo que ella cree que es aceptable. Pero ¿cuál es su nivel de aceptación?
Intenté darle el bibe dos días y uno comió 20ml y otro 15ml y ya antes de irme me dijo que tendría que dárselo a demanda. Eso se lo había dicho yo en la reunión que tuve con ella, no entiendo por qué no lo tenía claro ya.
Le he dado muchas vueltas este fin de semana y hemos decidido reducirme más la jornada para poder ser yo la que lleve a los peques y así que la última toma de Canija sea a las 8 de la mañana en vez de a las 6:30. Ayer en cuanto llegué hablé con la profesora de Pequeñín que estuvo dándole leche materna hasta el año y la pedí que por favor hablara y explicara a la profesora de Canija cómo tenía que darle el bibe y su experiencia. Después estuve hablando con la directora, que me escuchó y que gracias a que ella ha estado 10 años con bebés me dijo que efectivamente tenía toda la razón. Me dijo que no se trata de la profesora de Canija sino de la planificación general de nivel, por lo que hablaría con todas ellas para dejar claro que esa planificación sería para más adelante, ahora prima que poco a poco se vayan haciendo a los nuevos olores, nuevos ruidos, nuevas sensaciones, a separarse de su mamá, a empezar con el bibe y/o comida y que se trata de cubrir sus necesidades físicas y emocionales y dejar la planificación para más adelante.
Estoy muy angustiada. Ayer deje a Canija hora y media y al final esperé 45 minutos más hasta que se despertó. No es una niña llorona, ella gruñe cuando tiene hambre o sueño y así me lo comentó su profe. Cuando despertó se encontró desubicada y se puso a llorar, la cogió su profesora y se calmó, cosa que con mi madre no pasó. Yo tardé los segundos que se tardan en llegar del despacho de la directora a la clase de Canija y la recogí todavía con la marca de la sábana de acabarse de despertar.
Hoy he vuelto a llevarla hora y media, hemos pasado mala noche porque tiene moquitos y le cuesta respirar. Ha estado pegadita a mí y enganchada a su teta practicamente toda la noche. Ahora preguntaré a la directora cuándo va a hablar con ellas, no quiero que se demore y que esto se solucione antes de que me incorpore el lunes a trabajar, cueste lo que cueste, tenga que escalar todo lo que sea necesario.

Canija parece que su profe le gusta, yo me alegro que sea una persona cariñosa y que sus necesidades emocionales estén cubiertas, pero me gustaría que fuera menos estricta, no tuviera tan grabado en la cabeza rutina, rutina, rutina y que entendiera que los bebés son bebés y no entienden de planificaciones ni horarios, duermen cuando tienen sueño y comen cuando tienen hambre.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Llegó el día

Qué pena que mami no sepa parar el tiempo, qué pena que no sepa congelarnos y vivir juntas cada momento del día y no tener que separarnos.

No, no quiero dejarte, no, quiero pasar cada minuto de tu vida a tu lado y, sin embargo, tengo que hacerlo. Lo peor no es cómo me siento yo, que lleve con angustia y ansiedad casi un mes, lo importante es cómo vas a pasarlo tú y tu sufrimiento al ver que mami no está y no puede cubrir tus necesidades.

Y sé que no me vas a sorprender porque lo vas a llevar muy mal, porque ayer cuando te dejé con la abuela y me fui al médico, te encontré con un sofoco tremendo, casi una hora llorando y eso que la abuela te tenía en brazos. Al fin y al cabo la abuela resulta una extraña para ti, pero yo me quedé muchísimo más tranquila cuando te dejé con ella.

Miro el reloj y no quiero que llegue la hora, no quiero acompañarte a tu clase, no quiero hacer adaptación ni hostias en vinagre, yo quiero quedarme contigo, quiero cuidarte, darte el pecho, abrazarte, tumbarte a mi lado, hacerte cosquillas, cambiarte el pañal, esconderme detrás de mis manos y ver tu sonrisa desdentada cuando las aparto y quedarme las horas muertas mirando esos enormes ojos azules.

He hecho números cientos de veces en mi cabeza, he sopesado mil opciones, he pensado incluso lo genial que sería que algo no grave me ocurriera que me dejara estar contigo y cuidar de tus hermanos pero suficiente para no tener que incorporarme el próximo 23.

Apenas he dormido esta noche, entre otras cosas porque duermes con mi teta en tu boca y cuidado cómo se te escape, te he mirado cientos de veces y he llorado mares.

Por suerte hoy y mañana me quedaré contigo dentro de tu clase, pero la semana que viene irás quedándote en tu clase sola de forma progresiva.

Hoy es tu primer día de guarde, llevamos despiertas las dos desde las 5 y encima te has constipado. Hoy no puedo dejar de llorar al mirarte, hoy no quisiera tener que llevarte, hoy quisiera quedarme contigo, a tu lado, junto a ti. 

martes, 10 de septiembre de 2013

Vuelta al cole y período de adaptación

Después de casi 3 meses, a falta de 3 días, ayer mis hijos volvieron al cole y a la escuela infantil. Bichito estaba muy contenta, tenía muchas ganas de volver y ver a sus compañeros, pero Pequeñín no.

Ayer cuando aparqué en la puerta de la guarde Pequeñín empezó a revolverse en su asiento y decir: "Mami, ahí no". Aún así me acompañó junto a sus hermanas hasta la puerta donde le esperaban sus compañeros y su profe, pero él no quería entrar. Fue muy duro dejarle y separarme de él sabiendo que se iba a echar a llorar en cuanto cerraran la puerta y me fui con la lágrimilla asomando por el rabillo del ojo y con el corazón encogido.

De allí fuimos mi Canija y yo a acompañar a Bichito al cole, que abrazó a su profe, saludó a sus compañeros y entró tan contenta. Ella ya no hacía adaptación, directamente iba a clase de 9:30 a 13:30 y tampoco lo necesitaba, sin embargo, mi Pequeñín sí y fuimos a buscarle. El pobrecito estaba de espaldas a la puerta diciéndole a un compañero que iba a venir su mami. Dos toques al cristal y cuando se giró y me vio sus ojos se iluminaron, se fue corriendo a buscar a su profesora para que le abriera la puerta y volvió con los brazos abiertos para abrazarme. El abrazo fue enorme y acordamos que al día siguiente se traería a su Elmo para enseñárselo a sus compañeros y les contaría lo bien que lo pasamos viendo el desfile de luces de la playa. Culpa mía que se me olvidó animarle esa misma mañana a que llevara uno de sus juguetes y le hicieran más sencilla la transición. A lo largo del día hablamos sobre la guarde, nos dijo que nos echaba de menos y por eso lloró y que se llevaría hoy a Elmo.

Para él creo que el período de adaptación es necesario, estuvo llorando media hora de los tres cuartos de hora que le dejé. Creo que si hoy se lleva a Elmo será mucho menos traumático para él y estoy enfadada conmigo misma por no atender sus necesidades y hacerle más sencillo el proceso.


Muchos son los padres que piensan que el período de adaptación no sirve de nada. Yo estoy muy a favor de él, de una incorporación progresiva a la rutina de la escuela, con 4 años quizá ya no sea necesaria, pero con menos creo que además es beneficiosa.

Esa misma tarde estuve en la reunión con la profe de Canija, a la que más repercute estas idas y venidas de un sitio a otro. La primera impresión fue buena aunque me pareció demasiada estricta en imponer rutinas desde el principio tratándose de bebés. El jueves empezamos el período de adaptación y digo empezamos porque por suerte el jueves y el viernes entraré yo con ella, como la he llevado la tetina calma quieren ver cómo tienen que prepararle los bibes de leche materna y además creo que será mucho más fácil para mi pequeña si empezamos juntas. Pero esto ya os lo contaré más tranquilamente cuando llegue, mientras llevo días con mucha ansiedad y me entristece pensar que tengo que separarme de ella y dejarla en la escuela infantil siendo tan pequeña.

Y vuestros hijos, ¿cómo han llevado el primer día de cole? ¿Han hecho período de adaptación?

viernes, 6 de septiembre de 2013

¿Dónde está la vacuna contra la Varicela?

Me levanto esta mañana y leo el post de Amalia Arce sobre el Desabastecimiento de la vacuna contra la varicela y no salgo de mi asombro. En mi Grupo de Mamis ya alguna había comentado que la había costado encontrarla en la farmacia y que tuvieron que llamar a unas cuantas hasta que consiguió la vacuna, pero no podía imaginar que, como el Comunicado de la AEP explica, el laboratorio fabricante tiene lotes de vacunas disponibles, pero que están retenidos.

Nosotros hace un mes decidimos vacunar a nuestros hijos, entre otras cosas porque las cifras que se manejan son que la vacuna protege a más de un 95% de los casos de enfermedad grave, protege entre un 70 y 90% de la enfermedad clásica con lesiones en la piel y ofrece una protección más modesta contra la infección -que a veces resulta asintomática-, según podéis leer en este post sobre la vacunación contra la varicela. Y además porque yo me veía con Bichito viniendo del cole con varicela, pegándosela a su hermano y éste a su hermana más pequeña, con los tres malos entre una y dos semanas y haciendo malabarismos para poder ir a trabajar y cuidar a los tres. Y a esta ecuación podemos incluso añadir a su padre o cualquiera que pudiera echarme una mano cuidando a mis hijos.

La varicela tiene fama de enfermedad banal, pero cada año hay casos de varicelas complicadas. Recuerdo que cuando estaba embarazada de mi Bichito, en una de mis visitas hospitalarias por el PUPPE pillé la varicela, por suerte estaba ya de 32 semanas, pero al ser un caso grave y con posibilidad de contagio para el feto, me recomendaron tomar el antibiótico Aciclovir y creo recordar que pagué unos 40€ por él.

Yo respeto a aquellos que no quieran ponérsela a sus hijos e incluso hay familias que no pueden permitírselo por su elevado coste, unos 75€ por vacuna, pero no entiendo por qué la Agencia Española del Medicamento (AEMPS) ha bloqueado la distribución por considerar que se estaba vacunando "de forma abusiva". Si ahora corre el gasto por cuenta de las familias, ¿por qué lo bloquean? Me cuesta entender el por qué, así que si alguien tiene la más remota idea, por favor, que me lo explique.

¿Vosotros habéis vacunado a vuestros hijos de la varicela? ¿Estáis teniendo problemas para encontrarla en las farmacias?

jueves, 5 de septiembre de 2013

Reuniones escolares

Poco he hablado yo este año de Colegios y Escuelas Infantiles, será que para mí todo ha estado tranquilo. Este año no hemos tenido que elegir colegio y aunque hemos pedido plaza en la Escuela Infantil Pública para Canija no hemos tenido ningún problema para conseguirla. Entre los puntos de familia numerosa, hermano en el centro y renta, Canija ha quedado la segunda. He necesitado 3 hijos para no quedarnos en lista de espera y que mi hija entre directamente.

Ayer recibí la llamada de la profe de Pequeñín para preguntarme cómo le había ido el verano, hablar con él por teléfono y acordar la hora a la que le llevo el lunes. Su profe es un encanto, muy cariñosa con él y él la quiere mucho. Aunque hoy empiezan las escuelas infantiles, Pequeñín empezará ya el lunes y hará período de adaptación y tanto su profe como yo iremos viendo sus necesidades, no tenemos prisa.

Bichito también empezará el lunes, ella está deseando ver a sus amigos y a su profe. Por suerte, disfruta mucho yendo al cole y llevamos todo el verano cantando las canciones que allí ha aprendido.

Pero lo que más me inquieta y lo que me produce ansiedad estos días es la incorporación de Canija a la guarde. Cuanto más la miro menos quiero llevarla y más quiero quedarme junto a ella. Pero yo empiezo a trabajar el 23, por lo que ella tendrá que ir.

Hace un mes me llamó su profesora, en cuanto me dijo cómo era, supe quien era. No tengo ninguna referencia de ella, ni buena, ni mala, pero la primera impresión fue nefasta. Pero no nos engañemos cualquiera que me hubiera llamado me habría dado la misma impresión. Acordamos que el lunes 9 tendríamos la entrevista y a la semana siguiente, cuando Pequeñín ya esté adaptado y Bichito ya haya ido su primera semana al cole, haríamos la adaptación de Canija. Por suerte, los primeros días, puedo pasar con ella a la clase para que se vaya familiarizando con el entorno y con la profesora a mi lado. Quiero proponerla empezar entonces el jueves y viernes de la semana que viene y también lunes y martes de la siguiente. Me hablaron de un par de días pero ojalá pudieran ser otros dos días más.

Muchos son los niños que este año empezarán el cole y hoy, en casi todos, es la reunión de inicio de curso. Imagino que los nervios estarán en la boca del estómago de muchas madres y padres. Cómo os sentís vosotros? En qué estapa os encontráis?

lunes, 2 de septiembre de 2013

Atragantamiento

Uno de los mayores miedos cuando llega la etapa de meterse las cosas a la boca o de ingerir alimentos, es el atragantamiento. Los bebés tienen un mecanismo de defensa, cuando les llega algo sólido a la garganta su cuerpo provoca una arcada hasta que lo echan. Mucha gente piensa que es porque ese alimento le da asco, pero es su mecanismo para no ahogarse y que sus pequeñas vías respiratorias no se obstruyan.

Aún así, puede que algún objeto o algún alimento bloquee sus vías respiratorias parcial o completamente.

Como todo bebé Canija cosa que ve, cosa que se mete a la boca, el problema es que como ya ha empezado a gatear ella puede desplazarse para coger y examinar cualquier cosa que ve. Sus hermanos juegan cerca de ella, por lo que hay que tener mucho cuidado con lo que cae al suelo.

El viernes, justo antes de salir para venirnos una semana a la playa, Canija estaba en el suelo y empezó a toser y con arcadas hasta que vomitó un poco. Mi marido escudriñó el vomito y sólo me dijo que eran flemas, sin embargo, a mí me pareció que algo no iba bien. La coloqué hacia delante y como si mi dedo fuera un garfio intenté sacar lo que le molestaba, las arcadas provocaron la salida de un trozo de plástico transparente de un tamaño semejante a la mitad de mi dedo índice de largo y mismo ancho.

Vaya susto!!! Bichito había estado cortando con sus tijeras nuevas un trozo de plástico de una bolsa de golosinas!!! Por suerte todo quedé en un susto.


Os dejo los pasos que hay que seguir ante el atragantamiento de un bebé sacado de la web de Primeros Auxilios:

Si un bebé se atraganta, necesitas controlar rápidamente la situación para ver cómo puedes ayudar.
El atragantamiento de un bebé se produce cuando las vías respiratorias de una persona se bloquean de forma que no pueda respirar. Las vías respiratorias del bebé pueden estar bloqueadas parcial o completamente.
Los bebés, a veces se atragantan porque se meten pequeños objetos en la boca que luego se atascan. El atragantamiento también puede ser provocado por alimentos que se atascan.

Atragantamiento en bebés de menos de un año

Atragantamiento en bebés: Golpes en la espalda Un bebé que se está atragantando puede ser incapaz de llorar, toser o respirar.
  • Coloca al niño boca abajo a lo largo de tu antebrazo o sobre tu muslo, con la cabeza baja y apoya su cabeza.
  • Da hasta cinco golpes firmes en la espalda del bebé en la espalda con la parte de la mano que está entre la palma y la muñeca.
  • Detente después de cada golpe, para comprobar si el atragantamiento del bebé ha cesado. Para ello, observa el interior de la boca del bebé y elimina cualquier obstrucción que veas. No metas los dedos en la boca del bebé ya que a menos que puedas ver y llegar a la obstrucción, podrías empujarla más adentro y podría empeorar el atragantamiento.
  • Si la vía aérea sigue bloqueada, aplica hasta cinco compresiones en el pecho (ver más abajo)
  • Detente después de cada compresión para comprobar si el atragantamiento ha cesado.
Si las vías respiratorias del bebé todavía están bloqueadas después de tres ciclos de golpes en la espalda y compresiones en el pecho, debes pedir ayuda.
  • Llama a una ambulancia inmediatamente. No dejes al bebé sólo, mantenlo contigo.
  • Continúa con los ciclos de golpes en la espalda y compresiones en el pecho hasta que llegue la ayuda.

Compresiones de pecho en bebés de menos de un año

Compresiones de pecho en bebés Para atragantamientos en bebés de menos de un año, se usan las compresiones de pecho en una emergencia para desbloquear las vías respiratorias en caso de atragantamiento.
  • Coloca al bebé con su espalda a lo largo de tu antebrazo de forma que su cabeza y su espalda estén apoyadas.
  • Aplícale hasta cinco compresiones de pecho. Para ello, usando dos dedos, presiona hacia adentro y hacia arriba (hacia la cabeza) contra el externón del bebé, un dedo por debajo de la línea de los pezones.
  • Comprueba si el atragantamiento ha remitido tras cada compresión. No intentes quitar la obstrucción con los dedos a no ser que seas capáz de ver y agarrar lo que produzca el atragantamiento ya que, en caso contrario, podrías empujarla hacia adentro.

Complicaciones de un atragantamiento

Una vez que las vías de aire del bebé se han despejado, parte del material que causaba el atragantamiento puede quedarse ahí y crear complicaciones más adelante. Si el bebé todavía tiene tos o si le resulta difícil tragar, necesita ver a un profesional urgentemente.